El estudio del árabe se estanca, mientras que el inglés sigue siendo, con diferencia, la lengua más demandada. | ultimahora.es

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Las peticiones de plaza para estudiar ruso en la Escuela Oficial de Idiomas de Palma han crecido de forma espectacular: un 288 por ciento del pasado curso a éste. De las 86 demandas de plaza del curso 2011-2012 se ha pasado a las 334 del nuevo año académico, casi todas ellas para el primer nivel (básico 1). Este incremento se explica por el también importante aumento de turistas rusos a las Islas en los últimos dos o tres años.

La jefa de Servicio de las escuelas oficiales en la Conselleria d´Educació, Gabriela Torrens, explica que este curso no hay novedades en cuanto a nuevas lenguas, la última en incorporarse fue el chino, hace cuatro años, y la enseñanza del ruso lleva cerca de una década, «pero hasta ahora apenas tenía demanda». Este repunte del ruso ha obligado a realizar un esfuerzo para incrementar el número de profesores y la escuela de Palma ofrece este curso más de 200 plazas repartidas en siete niveles. Además, como novedad, a partir de noviembre se ofertarán uno o dos cursos de ruso enfocados al sector turístico, que serán gratuitos para personas en paro.

Hasta la semana pasada aún quedaban unas pocas plazas libres de ruso, como en el resto de lenguas. El chino tiene actualmente una demanda muy estable en los últimos años (alrededor de 300 personas), mientras que el árabe está perdiendo demanda, si bien todavía no registra un crecimiento negativo de demandas, y la razón es que se trata de una lengua que se estudia, en general, «por razones culturales» más que laborales, que es la principal motivación para estudiar un idioma de la mayoría de los alumnos de las escuelas oficiales.

Catalán

Las lenguas que menos demanda tienen, con diferencia -este año con crecimiento negativo- son el español para extranjeros y el catalán. El primero, razona Torrens, «porque en general las personas cursan los primeros niveles y después lo dejan, para seguir perfeccionando la lengua ya en la calle, en su vida cotidiana».

En el caso del catalán detrás de su pérdida de alumnos está, sin duda, el cambio normativo que elimina su conocimiento como requisito para acceder a la administración. Además existe más oferta de cursos de catalán. Torrens reconoce que «tenemos que promocionarlo más, reinventarnos». «La titulación oficial tuvo su momento, pero hoy día a muchas personas les interesa más estudiar lo básico en una escuela de adultos, y no necesita una titulación oficial».

El perfil medio del alumno de estas escuelas es el de una persona con formación mínima Bachillerato y la franja de edad, que antes era de entre 30 y 40 años, ha bajado «y ahora hay muchos más jóvenes en la veintena que se matriculan». Por último, indicar que este año las tasas de las escuelas tan solo han subido el IPC y rondan los 170 euros anuales.