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Ninguna de las asociaciones de comercio y de turismo que conforman el consejo asesor de la Fundación Municipal de Turismo 'Palma 365' secundó la iniciativa de instalar media docena de retretes autolimpiables y gratuitos en el centro de Ciutat para el alivio de los turistas. El regidor Álvaro Gijón explicó ayer que se piensa en otras alternativas ante el rechazo unánime a su propuesta.

Criterios de estética, de gasto de puesta en marcha y de funcionamiento de los retretes callejeros fueron esgrimidos ayer ante Gijón para desaconsejar su compra e instalación. Con esas recomendaciones Cort dejará de gastar con cargo a su presupuesto del presente año una cantidad cercana a los 500.000 euros entre la compra, los impuestos y el mantenimiento de los urinarios públicos.

Establecimientos voluntarios

Como alternativa a las demandas de los visitantes de Palma en sus necesidades físicas más inmediatas, el concejal Gijón señaló ayer que ha pedido a las asociaciones de restauración de Ciutat «una línea de aproximadamente una docena de establecimientos que se presten voluntarios en el eje Plaça d'Espanya-Parc de la Mar», que puedan ofrecerse para que sus baños, debidamente señalizados sirvan a estos fines con unas determinadas condiciones.

A ese respecto Gijón explicó que «se trata de ofrecer el modelo que en otros países europeos funciona desde hace años «con buen resultado», como es el que los baños de esos establecimientos sean gestionados por una persona que se responsabilice de su buen estado y limpieza «y que aquí podría corresponder a un programa de inserción social en el que coincidiría con un puesto de trabajo».

En todo caso el concejal Gijón indicó que en un lugar concreto de Palma, como es la escollera, «será necesario de acuerdo con la autoridad portuaria habilitar baños públicos, en edificio existente o portátiles, dada la gran cantidad de turistas que se dan cita en la zona».