Josep Ignasi Aguiló, con Rafel Bosch, en una imagen de archivo, en el Consolat de Mar. | Teresa Ayuga

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El Consell de Govern tiene previsto aprobar de forma inminente una ley de crédito extraordinario con la que pagar los 320 millones de euros en facturas que dejó sin contabilizar el Pacte. Se trata de las llamadas ‘facturas en los cajones’, correspondientes en su mayor parte a deuda del IB-Salut por encargos a proveedores que se hicieron sin la correspondiente partida en los presupuestos de la Comunitat.

Según los datos de que dispone el Govern, algunas de estos encargos se remontan al ejercicio de 2008. El director general de Pressuposts del Govern, Antoni Costa, explicó que todas estas facturas no tenían cobertura presupuestaria, pero con la aprobación de esta ley de crédito extraordinario pasarán a tenerla y las cantidades podrán pagarse a los proveedores.

IB-Salut

De los 320 millones totales, un total de 317,6 corresponden al IB-Salut y los tres millones restantes son impagos de la propia Administración, es decir, del conjunto de conselleries del Govern. El director general de Pressuposts quiso dejar claro que las facturas están contabilizadas desde que el Govern de José Ramón Bauzá accedió al poder, pero no están presupuestadas. Esta diferencia administrativa hace que todas estas cantidades que se adeudan no se puedan pagar. Costa aseguró que la intención es «eliminar la pelota» creciente que dejó el Pacte.

La aprobación de este crédito extraordinario está recogido en el plan de ajuste de las cuentas públicas de Balears aprobado hace unos meses por el Ministerio de Hacienda. En él se indica que, en previsión de que en 2012 se formalice este crédito, el presupuesto de gasto corriente se ha ajustado y recortado en estos 320 millones que se adeudan.

Déficit

La aprobación de este nuevo crédito no lleva aparejado un aumento en las previsiones de déficit del Govern para este año, cifrado en el 1,5 por ciento por el Ministerio de Hacienda. El director general de Pressuposts explicó que sí se generará un déficit contable, pero no un déficit presupuestario. Lo único que se hará, por tanto, es regularizar por la vía presupuestaria unos gastos que el Govern tiene contabilizados como deuda pero no puede pagar.

El plan de ajuste entregado por el Govern al Ministerio señala que, a lo largo del ejercicio económico de 2012, el Govern abonará un total de 789 millones a los bancos en concepto de amortización de deuda y de intereses. Durante el anterior Govern, el pago anual por este concepto rondaba los 80 millones.