Bauzá, Rodríguez y Prohens aplauden a Andreu Ferrer tras su elección como presidente de Nuevas Generaciones. | M. À. Cañellas

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El presidente del PP, José Ramón Bauzá, aseguró ayer en la clausura del congreso de Nuevas Generaciones, que en Balears se ha acabado «vivir de la sopa boba y de la subvención». Ante más de 150 jóvenes del partido, el presidente de la formación conservadora se refirió a las protestas de diversos colectivos en las Islas y afirmó que entiende que vengan de quienes vivían de las subvenciones. «Aquí era fácil y barato vivir del bote; entiendo que se quejen los que vivían de la subvención, y se van a quejar mucho tiempo», sentenció.

El presidente de los ‘populares’ de las Islas lamentó que haya colectivos y personas que se dediquen a hacer «caceroladas» contra la política de ajustes de su gobierno y alertó a los jóvenes de la formación política de que los cambios originan «resistencias» pero defendió que es lo que debe hacerse en estos momentos. Insistió en que su Govern «está para cambiar las cosas» y para que en Balears «no se venga a vivir del cuento». «Ni cacerolas, ni gritos ni pitos: a trabajar», dijo, para luego añadir que esa es la diferencia esencial «entre los que gritan y los que venimos a trabajar».

Críticas a la oposición

En su intervención, José Ramón Bauzá se mostró muy crítico con la gestión del anterior Govern, de quien dijo que no hizo nada en los cuatro años que gestionó la Comunitat Autònoma. «Ahora parece que no han estado durante estos cuatro años, pero estaban, y lo sé por las deudas que nos han dejado», señaló.

Lamentó que la oposición esté instalada en el ‘no’ permanente y reiteró que durante cuatro años no hicieron nada para cambiar el rumbo de la Comunitat, lo que ha obligado a su Govern a emprender una amplia política de reformas.

El presidente del PP pidió a los jóvenes de la formación que actúen desde el principio de la «vocación de servicio» y admitió que muchos ciudadanos están cansados de los políticos «porque durante muchos años han pensado exclusivamente en ellos y no en la sociedad». También les pidió que caminen «con la cabeza bien alta» y se muestren «orgullosos de ser del PP».

José Ramón Bauzá fue el encargado de clausurar el congreso, en el que antes había intervenido el recién elegido presidente de Nuevas Generaciones de Balears. Andreu Ferrer también se refirió a las protestas ciudadanos vividas estos meses en las Islas. «Que nadie piense que los jóvenes somos cuatro radicales que se dedican a tirar cacerolas», aclaró. Afirmó que quienes participan en estas protestas representan el «gamberrismo y la violencia», pero no a los jóvenes de las Islas.

Mallorquinidad

El líder de Nuevas Generaciones recriminó a los partidos de la oposición que «den lecciones» de ecologismo y de «mallorquinidad mientras aparcan sus coches sobre las dunas o no hablan catalán». Ferrer quiso hacer un reconocimiento público al presidente del PP de Palma, José María Rodríguez, de quien aseguró que ha aprendido que el partido «es lo más importante».

Además de Bauzá y Ferrer, en la clausura del congreso de Nuevas Generaciones intervino el secretario general del PP, Miquel Vidal, quien elogió el papel desempeñado hasta ahora por Llorenç Galmés, que ayer dejó su cargo como presidente de los jóvenes del PP. Galmés también intervino para despedirse de sus compañeros y animarles a que tomen ejemplo de Miquel Vidal, su mentor político.

La presidenta nacional de Nuevas Generaciones, Beatriz Jurado, pidió a sus compañeros de formación que defiendan la libertad por encima de todo y que sean fieles a los valores del PP.