Huguet se rodeó de la cúpula directiva para reivindicar la continuidad del CES.

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El presidente del Consell Econòmic i Social (CES), Llorenç Huguet, presentó ayer el documento aprobado por la asamblea general de este organismo -sólo con el voto en contra del representantes del Ejecutivo- en el que solicita al Govern que «reconsidere» su decisión de «suspensión temporal». El CES agrupa la representación de empresarios, sindicatos e instituciones públicas.

Huguet advirtió que, en contra de la opinión del Govern, «el CES no supone ningún gasto excesivo ni duplicidad con otros consejos», al tiempo que precisaba que su eliminación -con un presupuesto anual de 600.000 euros- «sólo será de alrededor de 125.000 euros ya que el coste más importante corresponde al personal y éstos son ocho funcionarios».

El todavía presidente del CES, la desaparición está prevista en el transcurso de este año, destacó el «beneficio social» que supone esta institución de representación social «que tiene que dictaminar la normativa en materia social y económica de Balears, aunque no con carácter vinculante. El CES es un instrumento básico de la democracia representativa».

Tras insistir en que su existencia está contemplada en el Estatut, a diferencia de otros consejos de comunidades que también está previsto que sean eliminados, Huguet criticó la postura del Govern ya que, en su opinión, «rompe el consenso social. La gobernanza se tiene que hacer con diálogo».

Huguet compareció junto con los dos vicepresidentes, Josep Oliver y Ernest Surià, y con la secretaria general, Àngels Bellinfante.