Votación en el anexo del colegio francés, en la calle Luis Fábregas. | M. À. Cañellas

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Unos 3.300 franceses residentes en las Islas pudieron ejercer su derecho a voto ayer en Palma en la primera vuelta de las elecciones presidenciales.
Esta la cifra que arroja el registro de ciudadanos galos en Balears. Al cierre de las mesas electorales, los responsables esperaban una participación cercana al 50 por ciento.
Un anexo del colegio francés, situado en la calle Luis Fábregas de Palma, sirvió a la comunidad de colegio electoral, ya que en estos comicios la votación no se ha realizado en la delegación consular.
La votación estuvo abierta a los ciudadanos de la República desde las 08.00 horas hasta las 18.00 h. siguiendo con la tónica general del país galo, salvo en las grandes ciudades donde permanecieron abiertos hasta las 20.00 horas.
Presencial
Los franceses con derecho a voto de Menorca, Eivissa y Formentera, se deberán desplazar a Palma para votar a no ser que hayan firmado un poder a otro ciudadano inscrito en las listas para que ejerza su derecho a voto.
La ley organiza electoral francesa no contempla la posibilidad del voto por correo, como permite la legislación española.
Una vez cerradas las mesas electorales, el cónsul honorario de francia, Michel Magnier, trasladó las actas al Consulado General de Barcelona, responsable de las comunidades autónomas de Aragón, Catalunya y Balears. A su vez, esta sede diplomática las trasladó al Ministerio del Interior francés.
En quince días, el domingo 6 de mayo, los franceses residentes en las Islas deberán repetir el mismo proceso, si bien en la segunda vuelta los candidatos se habrán reducido de 10 a dos: el actual presidente de la República, Nicolas Sarkozy, y el representante socialista, François Hollande.
Los sondeos dan como ganador para los próximos cinco años al socialista. Hollande tiene 57 años y durante su larga trayectoria política nunca ha formado parte de un Gobierno francés.