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El equipo de gobierno de Palma se ha mostrado hoy sorprendido por la buena acogida que ha tenido la apertura de los comercios en domingo en los dos días en que se ha aplicado la nueva medida, la cual a su juicio transmite la imagen a los turistas de que «Palma está viva los fines de semana».

Así lo ha expresado hoy en rueda de prensa el portavoz del Ayuntamiento, Julio Martínez, quien ha dado cuenta de los acuerdos de la junta de gobierno, entre los que destacan la demolición de varios edificios en el Moll Vell o el cambio de estrategia de Mapfre en sus contenciosos con el consistorio sobre la fachada marítima.

En cuanto a la apertura de los comercios gracias a la declaración por parte del Govern del centro de Palma como zona de gran afluencia turística, Martínez ha afirmado que han superado sus propias expectativas, ya que no esperaba que, tal y como ocurrió el pasado domingo, abrieran no solo los grandes comercios, sino también los pequeños y medianos.

Ha explicado que en los dos domingos en que se ha aplicado ha habido una gran afluencia de gente en la zona afectada por la declaración, que va desde avenidas hasta el centro, aunque ha reconocido que el pasado era Semana Santa y ello ha podido influir.

«Palma tiene vida los domingos», ha valorado Martínez, quien ha incidido en que esta medida se enmarca dentro de la política del Ayuntamiento de conseguir que la ciudad sea un centro turístico los 365 días del año.

Ha asegurado que el equipo de gobierno ha recibido valoraciones muy positivas tanto desde la patronal del comercio como de los vecinos y ha añadido que 5.000 cruceristas pudieron disfrutar el pasado domingo de las tiendas abiertas, un sector que Cort también quiere impulsar.

En cuanto a los acuerdos de la junta de gobierno, ha indicado que se ha aprobado la licencia de demolición de varios edificios del Moll Vell, entre ellos el del antiguo restaurante La Lubina, que se restaurarán y se destinarán a uso terciario.

Martínez ha explicado que estos inmuebles, propiedad de Amarres Deportivos S.L., estaban semiabandonados y que la licencia responde a la intención de modernizar esta zona del puerto de Palma.

Los servicios jurídicos del Ayuntamiento también han informado al gobierno local de que Mapfre ha dejado caducar uno de los contenciosos que tenía abiertos contra el Ayuntamiento por la fachada marítima.

Ha apuntado que ello responde a un «cambio de estrategia» de la aseguradora, aunque ha dicho desconocer en qué consistiría.

Otra de las medidas aprobadas hoy es otorgar la gestión de las pistas deportivas y los tres bares y restaurantes del parque de Sa Riera a la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Proyectos (SMAP) para que, según Martínez, se impulse este espacio de la ciudad que fue dado de lado por el anterior gobierno municipal.

Cort también ha desestimado las alegaciones del PSM-IV-ExM y de algunas asociaciones de vecinos para mejorar los pliegos de gestión de los casales de barrio, ya que ha considerado que estas alegaciones eran «posicionamientos políticos» más que mejoras técnicas.