Vidal, junto a su abogado, Eduardo Valdivia, antes de una de las sesiones. | Jaume Morey

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Un cambio cosmético del escrito de conclusiones del fiscal ha forzado un nuevo aplazamiento del 'caso Bitel' que, si no hay más incidentes, terminará el próximo martes, día 10. Las acusaciones rebajan de forma leve su petición de condena para Damià Vidal, de 14 a 12 años por delitos de cohecho, malversación, fraude y prevaricación. La rebaja es más notable en la cantidad que se reclama al ex director general de Bitel: 133.391 euros menos que al inicio del juicio, lo que hace un total de 565.951 euros que tendrá que devolver Vidal en caso de condena. Las acusaciones mantienen el grueso de las actividades por las que el acusado defraudó toda esa cantidad a la administración.

Acuerdos

El relato final de la Fiscalía tras el juicio plasma los acuerdos alcanzados con los acusados Sebastián Romaguera, Ivan Guardia y Ramón de la Iglesia, todos los cuales terminan con distintas multas. El otro acusado, Miquel Simonet, representado por el abogado Gaspar Oliver, queda exonerado al retirársele todos los cargos.

El incidente que llevó al nuevo aplazamiento se desencadenó por un cambio de última hora en el escrito del fiscal. Las acusaciones habían entregado a la defensa del principal acusado, Damià Vidal un escrito de conclusiones la semana pasada. Ayer, el día que estaba previsto concluir el juicio, el documento había cambiado. Según el fiscal, Pedro Horrach, los cambios se limitaban al tamaño de la letra, a la numeración de varios epígrafes y a la exclusión de varias de las facturas que se reclamaban a Vidal. El letrado, Eduardo Valdivia, molesto pidió un aplazamiento para examinar el nuevo documento antes de su informe final. La Sala accedió. Entre medias hubo algún momento de tensión entre el letrado y el fiscal que cortó el presidente, Eduardo Calderón, «no me gusta el derrotero que está tomando el juicio».