La caravana de coches organizada por los sindicatos recorrió las principales vías de acceso a Palma para informar sobre la huelga general.

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El Govern confía en que la huelga general de hoy transcurra sin «ningún tipo de incidente» que pueda perjudicar la imagen de las Islas al inicio de una temporada turística «con unas perspectivas muy buenas».

Así lo afirmó ayer el portavoz del Ejecutivo autonómico y conseller, Rafel Bosch, horas antes de que se conociera que la sala de lo contencioso administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) acordara mantener los servicios mínimos decretados por el Govern, a excepción de en los comedores escolares.

Bosch destacó ayer la importancia que tiene para Balears proyectar una buena imagen en los países emisores de turistas, por lo que insistió en que el objetivo es «garantizar que la imagen de Balears se va a dañar lo menos posible», de ahí que se hubieran decretado unos servicios mínimos del 60% en el transporte discrecional.

El portavoz del Govern hizo ayer un llamamiento «a la tranquilidad», con la intención de que sea un día en el que cada persona pueda ejercer su derecho a hacer huelga o, a no hacerla, «con total normalidad» y que de lo que se trata es de garantizar «el derecho efectivo a trabajar o no, al derecho a poder desplazarse, de poder ir a la escuela y de poder acudir a un centro sanitario si fuese necesario».

Horas antes una caravana de coches recorrió Palma, desde el hipódromo de Son Pardo, pasando por la Gran Vía Asima, y el centro de Palma para después de informar a los ciudadanos los objetivos de la huelga general.

Servicios mínimos

Horas después de la comparecencia de Bosch, la sala de lo contencioso administrativo del TSJB sentenció el mantenimiento de los servicios mínimos decretados el pasado día 23 de marzo por el Consell de Govern, a excepción de los de comedor escolar.

El tribunal desestimó la petición de suspensión presentada por los sindicatos UGT y CCOO de los servicios mínimos en el transporte escolar, comedores escolares, conserjes en los centros de Enseñanza Secundaria y en el transporte discrecional.

El magistrado Gabriel Fiol considera, en el auto judicial, que los servicios mínimos fijados en los centros públicos «no son desproporcionados», puesto que el hecho de que haya una persona en la conserjería es «esencial en la medida en que destinado a garantizar el acceso a los centros escolares».

También califica de «medida proporcionada» el hecho de que los servicios mínimos garanticen el 60% del transporte escolar para acceder a los centros públicos de Infantil y Primaria que no tienen transporte público alternativo en las zonas rurales.

En relación a los servicios mínimos del 60% para el transporte discrecional el TSJB ha decidido mantener el criterio fijado en sentencias anteriores, a pesar de recordar que en la huelga general del 29 de septiembre de 2010 se fijaron unos servicios mínimos inferiores. Fiol recordó que el 25 de enero de 2000 se estimaron razonables unos servicios mínimos del 80%, mientras que ahora se han establecido un 60%, debido a que «todavía no nos encontramos en plena temporada turística», puntualizó el magistrado Fiol.

Una vez conocido el auto del TSJB las organizaciones sindicales que habían pedido la suspensión de los servicios mínimos apuntaron que lo acataban, pero no lo compartían.

Manuel Pelarda, secretario de Acción Sindical de la UGT, y José Luis García, de CCOO anunciaron ayer que ambas organizaciones sindicales presentarán un recurso de reposición contra esta decisión judicial, para lo cual tienen cinco días, y en caso de que éste sea rechazado, presentarán un recurso ante el Tribunal Constitucional al entender que el decreto del Govern «vulnera los derechos constitucionales» de los trabajadores.

«La decisión judicial de mantener estos servicios mínimos añade mayor cabreo y un plus de conflictividad, por lo que no sé cómo se lo van a tomar los trabajadores, pero no creo que se lo tomen con mucho cariño», puntualizó Pelarda.