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La ordenanza municipal reguladora de la movilidad de los ciclistas por Palma inició ayer su tramitación en Cort con perspectiva de acuerdo en términos generales entre la mayoría del PP y los grupos de oposición, a los que agrada que en la exposición de motivos de la norma se afirme «una apuesta decidida por convertir a la bicicleta en medio de desplazamiento habitual por nuestra ciudad», y se hable de ella como transporte «sostenible y saludable».

Con todo, el regidor de Mobilitat, Gabriel Vallejo, advirtió al PSM-IV-ExM que primará la seguridad de los peatones en controversias como la posible incursión de las bicis por aceras anchas «que en Ciutat apenas existen y además pueden estar ocupadas por mobiliario urbano y terrazas de hostelería».

En definitiva, el grupo mayoritario del PP dio a entender que la puesta en marcha de una normativa específica «tendrá que ser lo suficientemente clara no sólo para los ciudadanos de Palma sino también para la Policía Local que habrá de velar en el futuro por su cumplimiento».

Bus de Son Sardina. El pleno aprobó ayer una proposición de los grupos minoritarios por la que la línea 12 de la EMT volverá a circular por el camino de Passatemps, en Son Sardina. El presidente de la EMT, Gabriel Vallejo, dio a conocer la consecución de un acuerdo con la propiedad de un campo deportivo al final de la travesía, que permitirá a los autobuses dar la vuelta en ese terreno y regresar al itinerario y frecuencias tradicionales de la línea.

Viviendas. El plenario asumió colaborar con su parque de casas de titularidad municipal a paliar situaciones de familias con graves dificultades económicas en el contexto de la crisis, pero rechazó peticiones del PSM tendentes a promover una bolsa pública de 5.000 viviendas «a precios asequibles» o de «recargar con un 50% el recibo del IBI para los titulares de viviendas vacías», medida esta última que tampoco obtuvo la adhesión del PSOE.

Violencia. La colaboración de Cort en campañas publicitarias contra la violencia de género y la discriminación en razón de sexo -moción ecosoberanista- fue asumida por el equipo de gobierno «ajustada a la disposibilidad presupuestaria debida a las actuales restricciones económicas».