Martínez ha explicado en una rueda de prensa que reducir el déficit es una prioridad para todas las instituciones por la actual crisis de la deuda y ha detallado que el Ayuntamiento no conocerá con precisión su déficit de 2011 hasta el mes de febrero, cuando disponga de todos los datos necesarios.
«Aún tenemos que cerrarlo, no tendremos los datos hasta el mes de febrero porque hay gastos no decididos por este equipo de gobierno y compromisos que no hemos podido eliminar», ha señalado Martínez, que ha puesto como ejemplo que la decisión de suprimir los dinamizadores lingüísticos no se ha podido llevar a efecto «porque había contratos».
«Hasta el 31 de diciembre hay partido», ha afirmado usando un símil deportivo y ha recordado que esa misma fecha es el plazo en el que vencen varias pólizas de crédito del Ayuntamiento que hay que cancelar, una situación que ha calificado como «un match point a superar por el equipo de gobierno».
Según Martínez, lo que ha hecho hasta ahora el gobierno municipal del PP, desde que tomó posesión en junio, ha sido «parar la maquinaria para reducir el déficit», pero ha advertido de que aún así «déficit va a existir».
El teniente de alcalde ha detallado que en los presupuestos de 2011 influyen toda una serie de variables como las modificaciones en los ingresos previstos o el hecho de que «hay facturas que no contabilizó el anterior equipo de gobierno y que no son pequeñas».
A modo de ejemplo, Martínez ha recordado que el gobierno del PP tuvo que reforzar partidas de guarderías porque no podían abrir en septiembre.
En relación a los ingresos, ha remarcado que una parte de ellos «se han portado mejor de lo esperado», como el caso del IBI, cuya recaudación se ha situado por encima de los 4 millones previstos, y de otros impuestos municipales que también «van por encima».
La incógnita son los ingresos por la participación municipal en tributos del estado que, según Martínez «es donde se está generando mayor volumen de déficit» y es un dato que no se conocerá hasta más adelante por el cambio de Gobierno tras las elecciones del 20N.
«Queremos ser prudentes, hay que dejar llegar al nuevo Gobierno, dejar que lo conozcan y a finales de diciembre podremos despejar toda una serie de incógnitas», ha señalado Martínez, que ha adelantado que para el año que viene la liquidación de 2010 será positiva.
Ha insistido en que «equilibrar las cuentas no se puede hacer en cinco meses» y ha recordado que si el Govern balear habla de un plazo de 2 o 3 años para lograrlo, también el Ayuntamiento de Palma necesitará «como mínimo dos años».
Ha afirmado que el déficit de 2010 era más elevado de lo que se aprobó en el Ayuntamiento «porque hay facturas no contabilizadas en el presupuesto».
El responsable de Economía y Hacienda ha subrayado la importancia de que el déficit sea una prioridad para todas las instituciones por la crisis de la deuda. «Tenemos que ayudarnos para salir de la crisis de la deuda porque, de lo contrario, cualquiera de los otros compromisos que adquieran los gobiernos serán totalmente inviables», ha afirmado.
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