Marc González y Miquel Batle, abogado y secretario general de Escola Catòlica respectivamente. | M. Joy

TW
11

Un nuevo varapalo judicial -y van unos cuantos- para la gestión del anterior conseller d´Educació, Bartomeu Llinàs. El Govern deberá pagar alrededor de 800.000 euros a los cerca de 60 docentes de la enseñanza concertada a los que se les debe la paga de antigüedad por 25 años de trabajo. Así lo establece una sentencia del TSJB, cuyo fallo estima el recurso presentado por la Associació Autonómica Educació i Gestió-Escola Católica de Balears, asistida por el abogado Marc González, contra la resolución del anterior conseller d´Educació de enero de 2010 por la que se establecía el calendario para dar cumplimiento el pacto quinto del acuerdo de febrero de 2004, relativo a la mejora de la enseñanza concertada.

En el pacto quinto del mencionado acuerdo se establecía un calendario para el abono -desde 2004 y hasta 2009- de la paga extraordinaria por antigüedad al personal de la concertada con 25 años de servicio, un derecho que ya recogía el IV Convenio Colectivo.

Unilateralmente

Pues bien, una vez abonada la paga en cuestión en el primer trimestre de 2009 a los nacidos a partir del 1 de enero de 1953, la Administración suspendió, debido a la situación de crisis, el pago a los nacidos desde 1954 y hasta 1960. Y en enero de 2010, el entonces conseller resolvió de forma unilateral establecer un nuevo calendario por el que los docentes que tenían derecho a la paga la percibirían, actualizada, entre 2011 y 2014, un acuerdo que contó con el apoyo de algún sindicato, pero que no logró el acuerdo de todas las partes. Esta es la resolución que fue recurrida por Escola Catòlica y ahora la sala establece que la Conselleria no podía modificar ese acuerdo unilateralmente.