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La Fiscalía Anticorrupción y el Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional han reunido pruebas «suficientes» para imputar al duque de Palma, Iñaki Urdangarín, en la ‘operación Babel', en la que se investiga dos subvenciones por importe de 2,3 millones de euros otorgados por el Govern de Jaume Matas al Instituto Nóos en 2005, cuando lo presidía el yerno del Rey.

Según confirmaron ayer a este diario fuentes judiciales, «todo apunta» a que finalmente llegará la imputación de Urdangarín, sobre todo, tras la documentación incautada en los registros de sociedades relacionadas con Nóos en Barcelona, y el interrogatorio del exsocio de Urdangarín, Diego Torres.

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Ayer, el fiscal Pedro Horrach y la policía tomaron declararión a Ana María, Marcos y Miguel Tejeiro, investigados en la supuesta trama societaria a través de la cuál, según los investigadores, Urdangarín y Torres se «apoderaron» de fondos públicos y privados que recibía el Instituto Nóos, una entidad sin ánimo de lucro que presidieron ambos.

«La operativa consistía en que por el Instituto Nóos se fijaban unos precios totalmente desproporcionados por los servicios que prestaba», relata el fiscal, que añade que luego la Administración «simulaba» la contratación de «servicios ficticios» o inflados, de manera que los fondos públicos acababan «en manos de mercantiles controladas por Diego Torres e Iñaki Urdangarín». El auto, asimismo, señala que están siendo investigados, entre otros, el exconseller de Turisme Joan Flaquer y la exconsellera d'Esports Maria Rosa Puig.

Flaquer, tranquilo
Flaquer, señaló ayer que «supongo que forma parte del protocolo de actuación». «El Ibatur tuvo una participación tangencial en los foros que organizó Noos y, además, que yo recuerde, no se hizo ninguna aportación económica», añadió.