Una de las ruletas del Casino, ayer, tras recibir el permiso de apertura. | Teresa Ayuga

TW
5

Los salones de juego del Casino de Mallorca en Porto Pí admitieron ayer las primeras apuestas después de que un informe jurídico emitido por el Govern certificara que las instalaciones cumplen con todos los requisitos exigidos por la normativa en materia de juego.


La ruleta y los distintos juegos de azar que forman parte de la oferta del Casino no se pusieron en marcha desde el pasado lunes, cuando las instalaciones fueron presentadas de manera oficial, debido a una denuncia presentada ante el Govern por la patronal balear de salones recreativos.


La denuncia incidía en supuestas irregularidades en el proyecto original de construcción de las instalaciones, y fue complementaria a la presentación de una querella, admitida a trámite por el Juzgado de Instrucción 8 de Palma.


Informe


El informe de los servicios jurídicos del Govern, firmado por la directora de la Abogacía Antonia Perelló y la abogada María Àngeles Berrocal, concluye, tras analizar todo el proceso legal seguido, que «en cuanto a la normativa de juego se refiere, se cumple con lo exigido con el Decreto 34/1997, de 7 de marzo, para autorizar la apertura y funcionamiento del nuevo emplazamiento (del Casino de Porto Pi)».


Añade que «las obras necesarias para el cambio de emplazamiento (de Calvià a Palma) están ejecutadas, las variaciones entre el proyecto presentado y el ejecutado no son sustanciales ni afectan a la normativa del juego», y finalmente precisa que, «si han habido modificaciones en el edificio o locales del casino, dichas modificaciones no están, ni mucho menos, prohibidas, sino incluso previstas en la normativa».


El Casino emplea a 167 trabajadores, es propiedad del Grupo Nervión, que ha invertido 8,5 millones de euros en esas instalaciones