Joan Batle, Juana Lozano y Miquel Alenyà. | Joan Torres

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Un total de 227.738 personas fueron atendidas el año pasado por la Creu Roja de Balears, un 6,23 % más que en el año 2009 y la demanda de ayuda continúa creciendo durante 2011.
Así lo indicó ayer el presidente autonómico de la entidad, Miquel Alenyà, en el acto de presentación de la memoria anual, acto en el que estuvo acompañado por Juana Lozano, coordinadora y Joan Batle, secretario de Creu Roja Balears.
Todas las líneas de actuación del área social de la organización -intervención social, inclusión social, empleo y emergencias sociales- han incrementado su actividad debido a las nuevas demandas a causa de la crisis económica.
Crisis
«Hemos multiplicado nuestros esfuerzos para apoyar a las personas más afectadas por la crisis», explicó Lozano y apostilló que se han reforzado «todos los recursos destinados a luchar contra la desocupación», incrementando considerablemente la oferta de formación y orientación para el empleo.
Creu Roja, que éste año cumple su 138 aniversario en las Islas, ha reforzado los programas dirigidos a los jóvenes, «colectivo muy sensible ante la situación económica actual», recordó Lozano y añadió que el refuerzo se ha visto reflejado en un incremento del 58,15% en el número de usuarios jóvenes. La organización, que ha contado con un presupuesto de 20.718.097 euros, reconoce que también tiene problemas para cobrar los convenios y subvenciones firmados con las Administraciones.
Alenyà remarcó, durante su intervención y a modo de ejemplo, que las UMES (unidades móviles de emergencia social) incrementaron su trabajo en un 40 % en 2010 con respecto al año anterior y en lo que va de año 2011 ya han vuelto a incrementar su demanda en un 20 %.
Tanto Alenyà como Lozano destacaron que buena parte del crecimiento de la entidad se debe al voluntariado de la organización, en un 4,51% con respecto a 2009 y ha supuesto un elemento fundamental para la ejecución de los programas y las líneas de actuación.