Los regidores del Ajuntament de Palma en corporación portaron el Estendard en la Plaça de Cort. | Pere Bota

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«La decisión de romper el pacto vigente hasta entonces, más allá de las consecuencias que se derivaron, fue complicada. El ruido y la crispación fueron intensos, pero la volvería a tomar una vez y otra. Tantas como fuese necesario, más allá del ruidos y las amenazas. La volvería a tomar porque lo que nos jugábamos como consistorio no era la estabilidad de un gobierno, sino la decencia de la vida pública». Así de contundente se manifestó la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, durante su discurso del pasado 31 de diciembre con motivo de la fiesta del Estendard, en el que cargó contra la corrupción y especialmente contra UM, sus socios de gobierno hasta el pasado mes de febrero.

«El año que cerramos ha estado cargado de noticias feas y desalentadoras. Muchas vinculadas a las malas prácticas de responsables políticos que se permitieron hacer suyo lo que era de todos», aseveró. Calvo añadió que «quiere encontrar consuelo en los esfuerzos de regeneración de las formaciones políticas directamente afectadas. Los hechos me han vuelto a confirmar una vieja convicción: en la vida política ni todo vale, ni todos somos iguales».

Críticas

El discurso de Calvo no fue del agrado de los partidos de la oposición; la ex alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, se levantó y se fue. «No me doy por aludida para nada, pero me ha parecido de muy mal gusto porque estoy en un partido (PP) que ha sido tratado muy injustamente. El cargo de alcaldesa no se ejerce de esta manera. Además, a ella ni se lo han dado los ciudadanos, ni ha hecho nada para merecerlo», argumentó.

El portavoz del PP, Julio Martínez, también criticó el discurso. «En Palma la persona que se está beneficiando de la corrupción es Calvo, sino se hubiesen comprado votos ella no sería alcaldesa», declaró.

El presidente de UM, Marc González, también condenó el discurso de Calvo, al que calificó de «ridículo», ya que considera que «se presentó como la salvadora de la supuesta corrupción». En su opinión, hizo «un ataque a los que han posibilitado que sea alcaldesa» y le advirtió que «si de cara al mes de mayo cree que es necesario construir puentes es necesario no pegar patadas». González aseguró que Calvo «es incapaz de construir un discurso que no sea sobre esto porque sus grandes realizaciones son el carril bici d'Avingudes».

El presidente de UM también reprochó a Calvo que no hiciese alusión a temas importantes, como el palacio de congresos. En su opinión, debería haber explicado a los ciudadanos por qué ha cambiado de opinión y ha pasado de decir que todo el peso de la Ley caería sobre Barceló por abandonar el proyecto, a que la salida sea por mutuo acuerdo y pagar la citada infraestructura turística con dinero público.

Tras el ataque a sus rivales políticos, la alcaldesa hizo mención a la crisis económica y señaló las mejoras que entiende que se han realizado este año en Ciutat. Entre otras destacó el corredor verde la fachada marítima, el parc de les vies, «nuevas normas de convivencia como la del botellón» y los ejes cívicos «que dinamizan comercialmente y socialmente los barrios». Calvo terminó su discurso recordando a personas que han fallecido en 2010. «Nos guían muchos ejemplos de grandes personas que ya no están entre nosotros y que echamos de menos. José María Lafuente, Raimundo Clar... El ejemplo de Félix Pons, del bombero Alejandro Ribas, del montañista Tolo Calafat, de los periodistas Sebastià Verd y Joan Pericàs».

En lo que se refiera a la celebración, no faltaron los jinetes de los Cavallers de Sant Jordi, los Tamborers de la Sala, los Cossiers, los Cavallets de la Escola de Música i Danses de Mallorca y los Ministrils del Consell de Mallorca; se colocó la cimera del rey Martí en la puerta de Cort y la Banda de Música Municipal interpretó 'La Balanguera'. Tras la misa en la Seu, la comitiva volvió a dirigirse a la plaça de Cort, donde tuvo lugar la representación de 'La Colcada', de Pere d'Alcàntara Penya, a cargo de Miquelina Lladó y de los alumnos de la Escola de Música i Danses de Mallorca. El acto contó con una gran afluencia de público, entre ellos el delegado del gobierno, Ramón Socías; la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol; o la presidenta del Parlament, Aina Rado, entre otros.