Un bebé de la UCI de Neonatología, trasnportado con una incubadora a Son Espases. | S. Amengual

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La operación de traslado de los pacientes ingresados en el hospital Son Dureta al nuevo Son Espases, que se ha llevado a cabo de forma escalonada desde el 19 al 22 de diciembre, concluyó ayer sin incidentes.
El área de hospitalización de Son Espases ya está totalmente abierta y cuenta con 295 pacientes ingresados en el centro sanitario y ya se han dado 21 altas médicas.
La última operación de traslado se inició ayer a las 9.30 horas, con la salida del primer paciente del área materno-infantil de Son Dureta y el último llegó a Son Espases alrededor de las 16.30 horas.
En total ayer se trasladaron a 9 bebés de la UCI de Neonatología; 3 mujeres y sus bebés; 7 niños de la UCI Pediátrica; 13 bebés de la Unidad de Curas Medias de Neonatología; 3 enfermos crónicos pediátricos; 2 pacientes de Psiquiatría; 15 de hospitalización pediátrica y 3 de Ginecología.
En el dispositivo de traslado participaron 7 UVI móviles; 8 ambulancias de apoyo vital básico y un autobús de transporte colectivo.
Un total de 403 pacientes ya han acudido al servicio de urgencias de Son Espases desde que abrió sus puertas la noche del pasado domingo. En las últimas 24 horas se han generado 39 ingresos.
Durante el día de ayer se llevaron a cabo 8 intervenciones quirúrgicas y en total ya se han realizado 18 operaciones en los quirófanos del nuevo hospital.
Satisfacción
El ambiente entre los profesionales y el equipo directivo de Son Espases era de satisfacción por haber podido completar sin incidentes destacables la operación de traslado.
Así lo confirmó ayer el conseller de Salut i Consum, Vicenç Thomàs, acompañado por el director general del IB-Salut, Josep Pomar, el director general de Son Espases, Luis Carretero y el director asistencial, Lucio Pallarés.
«Hemos vivido un hecho histórico y emotivo en el que todos los profesionales lo han dado todo para que el proceso culminara con éxito, con seguridad y con la máxima tranquilidad y con la calidad asistencial garantizada», afirmó ayer tarde Thomàs.
También manifestó que el hospital irá «cogiendo fuerza poco a poco» y pidió disculpas a los usuarios «por los problemas que se puedan producir. Estamos escuchando todas las sugerencias y así iremos resolviendo los pro lemas», puntualizó el conseller de Salut i Consum.
Y problemas hay y los habrá en los próximos días. La comida está llegando tarde y en muchas ocasiones fría. No hay televisión ni línea telefónica en las habitaciones y, en algunas zonas del hospital, también se han detectado problemas de climatización.
Unos problemas que la concesionaria de las obras y el IB-Salut deberán ir resolviendo para garantizar la mejor atención sanitaria posible a los pacientes y visitantes del nuevo centro hospitalario de las Islas.