Miles de pasajeros han sufrido los efectos de la huelga encubierta de los controladores. | Jaume Morey

TW
74

Las compañías han informado de que los espacios aéreos de Madrid, Barcelona, Balears y Canarias permanecerán cerrados hasta las 12.00 horas, a pesar de que inicialmente se hablaba de que la actividad aérea se reanudaría a las 08.00 horas.
Este dato no ha sido confirmado por AENA, que tampoco ha facilitado aún ninguna cifra sobre los controladores que se habrían incorporado a sus puestos en el turno de mañana, que se inició a las 08.00 horas.

Fuentes aeroportuarias han manifestado que en Barcelona han acudido al Centro de Control varios trabajadores, pero "ninguno ha firmado la hoja de actividad para iniciar su labor", y han detallado, además, que un grupo de controladores se trasladó al Centro de Torrejón en Madrid tras celebrar una asamblea en un hotel cercano a Barajas.
Se desconoce si este grupo de controladores "ocupará las frecuencias designadas" o se limitarán a personarse en el Centro.
Las mismas fuentes detallaron que tras la asamblea celebrada en el hotel madrileño los controladores comentaron entre ellos que "afrontamos dos días duros y ya hemos pasado medio".

En el aeropuerto de Barajas han aterrizado esta madrugada seis vuelos transoceánicos, cinco de los cuales eran de Iberia.
La compañía ha explicado que sólo se permite la llegada de los vuelos transatlánticos y la aerolínea prevé la llegada de otros 14 a lo largo de la mañana a Madrid.

Iberia sigue recomendando a los viajeros que consulten su página web o llamen a sus teléfonos de atención al cliente antes de desplazarse al aeropuerto.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha convocado un Consejo de Ministros extraordinario para las 9.00 horas de este sábado para declarar el "estado de alarma" en caso de que la situación de los aeropuertos españoles "no se normalice completamente", según anunció el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

"El Estado de alarma supone que se va a movilizar a todos los controladores y que, en el caso de que alguno no acuda a su puesto de trabajo, pasará inmediatamente a disposición judicial, acusado de un delito que puede acarrear graves penas de prisión", explicó el vicepresidente.

Pérez Rubalcaba quiso "insistir" ante la opinión pública en que "el Gobierno está decidido a seguir utilizando todos los instrumentos que el Estado de Derecho pone a su disposición para impedir que un conjunto de trabajadores defiendan algunos de sus privilegios perturbando gravemente la vida nacional".

Rubalcaba anunció al filo de la medianoche que el Ministerio de Defensa ha asumido la dirección del control aéreo español dada «la situación de extrema gravedad» que se vive en los aeropuertos españoles.

Con la asunción por parte de Defensa de la navegación aérea en el ámbito civil, en razón de la situación de emergencia prevista en la Ley de Seguridad Aérea, la actividad de los controladores quedaría bajo la organización, planificación, supervisión y control de este Departamento.

El incumplimiento por parte de los controladores aéreos de las directrices de Defensa en ese caso será considerado una infracción de la Ley de Seguridad Aérea y dará lugar a la exigencia de las responsabilidades civiles o penales que procedan.

De hecho, una veintena de miembros de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía entraron en la noche de ayer en la sala del Hotel Auditorium, donde está reunido un grupo de controladores aéreos.

Algunos de los policías dialogaron con representantes del grupo de controladores en la Sala Príncipe Felipe, donde permanecían reunidos, para informarles de las consecuencias legales a las que tendrán que hacer frente de no incorporarse a sus puestos de trabajo.

Se da la circunstancia de que en este mismo hotel han tenido que alojarse algunos grupos de viajeros que han visto cancelados sus vuelos. Una decena de afectados, al conocer que los controladores estaban en el hotel, ha procedido a increparlos con gritos de «¡ladrones!», «¡privilegiados!», o «no hay derecho a que nos hagáis esto».

Miles de pasajeros atrapados en las islas

Un total de 8.600 pasajeros y 159 vuelos vieron afectados en Balears ayer por la ausencia de los controladores aéreos, que ha provocado el cierre de los aeropuertos de Palma, Menorca e Ibiza. Actualmente se está a la espera de lo que se determine desde el Gobierno central.

Así, en Son Sant Joan se encuentran 'atrapados' 6.000 pasajeros correspondientes a 114 vuelos, mientras que en el Aeropuerto de Ibiza hay 2.200 viajeros de 25 conexiones esperando a que se reabra el tráfico aéreo.

Por su parte, en Menorca no han podido volar 400 personas, después de que hayan resultado afectadas 20 operaciones.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya tiene sobre su mesa para firmar a las 22.20 horas la orden que permite a los militares tomar el control del espacio aéreo español si los controladores no se incorporan a sus puestos de trabajo, informaron a Europa Press fuentes del Ministerio de Fomento.

Mientras, Eurocontrol ha anunciado que los Aeropuertos de Palma, Barcelona Madrid y Gran Canaria no serán reabiertos hasta las 8.00 horas.

Protestas en Son Sant Joan

Miles de viajeros protestan desde esta tarde en el aeropuerto de Palma por las cancelaciones. Frente a las oficinas de las compañías aéreas se han formado largas colas de viajeros que piden explicaciones por lo sucedido y a los que se aconseja que suspendan sus vacaciones previstas para este puente de la Constitución.

En los paneles de información del aeropuerto de Son Sant Joan todos los vuelos están cancelados o retrasados, según ha podido comprobar Efe, mientras que desde megafonía se informa de que el espacio aéreo está cerrado y piden que disculpen las molestias.

Así, han señalado que éstas son las operaciones previstas desde las 17.30 hasta las 01.00 horas, si bien han precisado que «no están canceladas, sino en stand by y, por tanto, no han podido ser operadas».

En total, para este viernes había programadas 313 operaciones en los aeródromos de las islas, por lo que la ausencia de los controladores ha provocado que se dejen de operar el 36,4 por ciento de las conexiones previstas.

Las compañías aéreas están informando a los pasajeros de que no saben cuándo podrán reanudar los vuelos y piden a los clientes que suspendan sus vacaciones y regresen a casa, ya que no hay información alguna que avale la posibilidad de que mañana o pasado se puedan reanudar los vuelos.

Noticias relacionadas

Las compañías indican a los viajeros que les devolverán el dinero del billete.

Numerosos grupos de pasajeros deambulan por el aeropuerto de Palma muy enfadados por este cierre del espacio aéreo por sorpresa y se resisten a irse a casa sin lograr tomar el vuelo previsto.

Una de los viajeros atrapados en el aeropuerto es la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol, que tenía previsto desplazarse en avión.

Llamamiento a la tranquilidad

El portavoz de la Unión Sindical de Controladores (USCA) de Balears, Javier Zanón, llamó a la tranquilidad y ha pedido a los compañeros del turno de noche que se incorporen con normalidad a las 22.00 horas a sus puestos de trabajo en los centros de control de los aeropuertos.

En declaraciones a Efe, Zanón ha afirmado que la actuación esta tarde de los controladores no responde a una protesta organizada, sino que es fruto del estrés que padecen por las condiciones laborales a las que están sometidos y, especialmente, por el nuevo modelo de gestión aeroportuaria que ha aprobado hoy el Gobierno

«En una situación así no se puede trabajar», ha indicado Zanón, que ha «lamentado profundamente» las consecuencias que la acción de los controladores tienen sobre los afectados.

Para el portavoz de USCA en las islas, la situación es «muy preocupante» y responde a una «acumulación de decretos y de leyes» en los que se lleva, desde hace 10 meses, «vilipendiando y humillando» al colectivo

«Esta mañana, otra vez, cuando llevamos avisando desde primavera y cumpliendo escrupulosamente a esa ley que hicieron a su medida (...), estos señores salen con un decretazo más y vuelven a prolongarnos la jornada laboral», ha explicado respecto a lo aprobado hoy por el Ejecutivo.

El portavoz del sindicato ha afirmado que todas estas medidas que perjudican al sector han tenido hoy un «efecto individual» sobre los controladores: «Hay gente que se ha puesto nerviosa, ha habido ansiedades, ha habido que llamar a médicos y en esas circunstancias no es seguro trabajar», ha afirmado.

Zanón ha defendido que lo ocurrido esta tarde no es por tanto una protesta organizada, ha reclamado «normalidad» y «tranquilidad» y ha pedido a los compañeros del turno de noche que «entren a trabajar», ya que ha asegurado que el problema «es solucionable».

«Esperamos que se cumpla el siguiente turno» ha asegurado el portavoz, aunque ha reconocido que no sabe cuánto va a durar: «Desconozco cuál es la situación y cuál va a ser mañana», ha apuntado.

Zanón también ha acusado a Aena de haber cerrado «unilateralmente» el espacio aéreo. «Imaginamos -ha dicho- que formará parte de su plan y en ese plan estaremos como culpables».

Los controladores aéreos españoles han abandonado hoy sus puestos de trabajo aludiendo problemas físicos, lo que ha ocasionado el cierre de todo el espacio aéreo, menos Andalucía, y que unas 250.000 personas se hayan visto afectadas al comienzo del puente de la Constitución y de la Inmaculada.

Recomendaciones de Consumo

La Dirección General de Consumo del Govern balear ha recordado que las compañías aéreas tiene que hacerse cargo de los viajeros afectados por el cierre del casi todo el espacio aéreo español a causa de los controladores.

Además, la Consellería de Salut i Consum ha subrayado que el transporte sanitario urgente por vía aérea está garantizado en todos los casos.

En un comunicado, Consum ha afirmado que la presunta huelga encubierta de los controladores aéreos que ha provocado el cierre de Son Sant Joan «es considerada una causa de fuerza mayor, no imputable a las aerolíneas», pero las compañías aéreas deben cumplir con una serie de obligaciones con sus clientes y se harán cargo de los pasajeros que no hayan podido viajar.

Consumo recuerda que en caso de retraso o cancelación de un vuelo, los consumidores tienen derecho a ser informados sobre las anomalías previstas y recibir el importe del billete si el pasajero decide no viajar debido a la demora o anulación.

También tiene derecho a comida y bebida suficiente mientras esperan la salida del vuelo, alojamiento, si la espera incluye una noche, al desplazamiento desde el aeropuerto hasta el hotel y a realizar dos llamadas telefónicas, fax o correo electrónico.

La Dirección General de Consum ha informado de que la asistencia o la devolución del dinero se debe pedir directamente a la compañía aérea.

El incumplimiento de estas obligaciones permite al consumidor presentar reclamaciones en el Centro Europeo del Consumidor o en cualquier oficina de consumo de Balears.

Consumo ha recordado que el aeropuerto de Palma cuenta con una Oficina de Atención al Consumidor, gestionada por el Instituto Nacional de Consumo.

Esta oficina permanece abierta de 7:00 a 20:00 horas de lunes a viernes, y de 8 a 14:00 horas durante los fines de semana.

Además, Son Sant Joan tiene instalados cinco puntos telemáticos de atención al consumidor, repartidos por las diversas zonas de las instalaciones aeroportuarias.

Estos puntos telemáticos son de uso público y gratuito, y permiten descargarse la hoja de reclamaciones, interponer una reclamación por Internet y acceder a la página web del Centro Europeo del Consumidor, según Consum.