Una bañista observa el agua sucia. | S. Amengual

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El agua de la Platja de Palma presenta desde hace unas dos semanas un aspecto marrón por las obras que la Conselleria de Medi Ambient está acometiendo en el torrent de Sant Jordi. Los hoteleros de la zona exigen que se paren los trabajos, ya que los turistas se quejan y no descartan que se estén produciendo cancelaciones de reservas, según explica el presidente de la asociación de Hoteleros de la Platja de Palma, Francisco Marín. «Esta zona vive del sol y la playa, por lo que si el agua está marrón es algo que no nos ayuda. No entendemos por qué no se paran las obras en temporada alta», aseveró Marín. Además, añadió que la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, se ha comprometido con ellos a resolver esta problemática.

Sin embargo, desde la Conselleria de Medi Ambient reconocen que el agua va a seguir teniendo este aspecto, ya que no está previsto que las obras finalicen hasta finales de agosto. Además, aseguran que las obras no se pueden parar totalmente porque tienen que estar terminadas antes del mes de septiembre, cuando suelen producirse lluvias torrenciales.

No obstante, el director gerente de Abacua, Mariano Morey, manifestó que las actuaciones que provocan una mayor suciedad del agua ya se han terminado y aseguró que si hay algunos trabajos que generen más suciedad se pararán hasta después de la temporada alta. Morey explicó que intentan remover la tierra lo menos posible y destacó que utilizan técnicas que arrastran la menor cantidad de tierra posible para que no se ensucie mucho el agua.

Respecto a las críticas recibidas por estar ejecutando las obras durante la temporada alta, el director gerente de Abacua respondió que los trabajos comenzaron el pasado mes de octubre y tenían un plazo de ejecución de seis meses, por lo tenían que tenían que haber terminado en abril. Sin embargo, las abundantes lluvias de este año han ralentizado los trabajos.

Obras necesarias

Desde la Conselleria de Medi Ambient recordaron que se trata de unas obras muy necesarias para evitar las inundaciones del Pla de Sant Jordi y las plagas de mosquitos que afectan a los vecinos de la zona.
Por su parte, el Ajuntament de Palma ha realizado pruebas y aseguran que el agua no está contaminada, por lo que está permitido el baño.