La imagen del Passeig Marítim tras el 'botellón' es realmente desoladora, como se puede observar en la fotografía. | Teresa Ayuga

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Los hoteleros han amenazado a la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, con cerrar los hoteles del Passeig Marítim si no regula el fenómeno del 3. De cumplirse esta advertencia, la zona turística más emblemática de la capital balear caería en un estado de degradación total y absoluto, ya que precisamente son los hoteles más importantes los que primero cerrarían sus puertas.

Los clientes, por lo general de un poder adquisitivo medio y alto, se quejan del ruido por las noches y de la suciedad a primeras horas de la mañana. Los hoteleros no son los únicos que protestan por el botellón, sino que también lo hacen los vecinos y los restauradores de la zona.

El actual equipo de gobierno de Cort comenzó a trabajar para combatir el fenómeno del botellón a principios de legislatura, pero las discrepancias entre los socios de gobierno han impedido llevar a Junta de Gobierno una propuesta de ordenanza para posteriormente aprobarla en el pleno.

Sin embargo, tras el ultimátum de los hoteleros la alcaldesa de Palma decidió presentar un proyecto de ordenanza elaborado por el Àrea d'Educació, Igualdat i Drets Cívics, sin haberla consensuado con sus socios de gobierno del Bloc.

El borrador elaborado por una de las áreas gestionadas por el PSOE contempla zonas de especial protección, en las que estará prohibida la concentración de personas entre las 22:00 horas y las 8:00 horas. Esta declaración se revisaría cada seis meses y estarían señalizadas. La regidora d'Educació, Igualdat i Drets Cívics, Cristina Ferrer, ya ha manifestado públicamente que el Passeig Marítim reúne todos los requisitos para ser declarado son de especial protección, en el caso de aprobarse el borrador que ha entregado a todos los grupos políticos.

Las zonas de especial protección son unos de los aspectos que menos gustan al Bloc, ya que entiende que no son la solución sino que se limitarán a trasladar el problema a otras zonas de la capital balear. Además, considera que no es necesario crear nuevas ordenanzas y asegura que el botellón se puede combatir haciendo cumplir las ordenanzas vigentes.

Propuestas aprobadas

En la resolución del debate del estado de la ciudad, que se celebró el pasado jueves se aprobaron varias propuestas sobre el botellón. En concreto, a propuesta de UM se aprobó por unanimidad que el pleno acuerde tramitar con urgencia el borrador de la ordenanza reguladora de la actuación municipal para el fomento del civismo y la convivencia en relación al botellón.

A propuesta del Bloc, también se aprobó por unanimidad instar al equipo de gobierno, independientemente de las modificaciones normativas que se puedan tramitar, a incrementar con carácter inmediato los recursos para abordar el botellón. Se trata de garantizar que haya suficientes contenedores para la recogida de basura, incrementar la presencia policial para garantizar el cumplimiento de las ordenanzas existentes en materia de convivencia y articular mecanismos que garanticen la detección y sanción de la venta de alcohol a menores.

Por su parte, a propuesta del PSOE se aprobó con los votos a favor del Bloc, la abstención del PP y el voto en contra de UM elaborar un plan de actuación anual sobre el fenómeno del botellón, que aprobará y evaluará la comisión de seguimiento constituida por los grupos municipales, entidades, asociaciones, empresarios, etc. El plan de actuación y la comisión se enmarcarán dentro de la futura ordenanza de regulación de la convivencia y el botellón.