Francesc Fiol, portavoz del PP en el Parlament. | Jaume Morey

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El portavoz del Partido Popular (PP) en el Parlament de les Illes Balears, Francesc Fiol, dejó ayer en suspenso el apoyo de los populares a la Ley de recorte del gasto público que trabaja el Ejecutivo de Francesc Antich, aunque la aprobación inicial se encuentra atascada en el Consell de Govern.
En este sentido, Fiol calificó de «lamentable» que el Govern no haya dado aún luz verde a la aprobación parlamentaria de su plan de ajuste anunciado por el president Antich, debido a «enfrentamientos internos» en el seno de un Pacte totalmente «desarbolado».
El portavoz del PP criticó en rueda de prensa que el Ejecutivo no logró el pasado viernes sacar adelante las medidas anunciadas por el propio Antich en el Parlament porque las diferentes formaciones que componen el Pacte «no se ponen de acuerdo» en temas «verdaderamente menores» como que directores y asesores, del PSIB-PSOE o del Bloc, deben cesar en sus cargos.
No obstante, parece que las tiranteces entre los socios han remitido, ya que el conseller de Presidència, Albert Moragues, anunció también ayer que el viernes el Govern aprobará tres leyes. Una para reducir el gasto en 103 millones, y otras dos dirigidas a incrementar impuestos.
En cuanto al posible apoyo de los conservadores a la mencionada Ley, Francesc Fiol recordó que, a día de hoy, «la pelota está sobre el tejado del Govern». En este sentido, anunció que una vez el articulado haya superado el escollo de las disputas entre los socios del pacto, el PP, «pese a no conocer la magnitud de la Ley», procederá a pronunciarse sobre su contenido, aunque manifestó serios recelos sobre la congelación de las pensiones y los recortes en los sueldos de los funcionarios
Lo que sí dejó meridianamente claro ayer Fiol, fue que su formación no respaldará ninguna medida legislativa que redunde en una mayor presión fiscal para los ciudadanos.
El Bloc se enroca
Por su parte, el Bloc dejó patente su enroque frente al decreto de ajustes aprobado por el Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero.
La coalición de izquierdas registró ayer en el Parlament una proposición no de ley para que el cónclave parlamentario rechace citadas medidas, porque «pretenden que pague la crisis quien no la ha generado».