TW
3

Uno de los principales constructores de Balears, Miguel Llabrés Feliu, ha sido detenido en el transcurso de la operación Bomsai. La policía trata de aclarar si desde esa empresa se pagaron comisiones o 'mordidas' a políticos.
El empresario, de 76 años, fue arrestado en la noche del martes y durmió en los calabozos. Pidió ser asistido por un médico, ya que se encontraba indispuesto, y por la mañana prestó declaración. Negó haber pagado ningún tipo de soborno y luego quedó en libertad con cargos, por motivos de salud. Su hombre de confianza y ex administrador de Llabrés Feliu, Miguel Toledo, también declaró y rechazó haber cometido cohecho, malversación o fraude a la Administración.
De momento, las pesquisas policiales se centran en la UTE que edificó el nuevo parque de bomberos, en Son Malferit, y que estaba formada por Llabrés Feliu, Gerens Management Group, Constructora San José, Estel Ingeniería y Gestión de Proyectos Balear. Cuando los investigadores lleguen al otro edificio bajo sospecha, la nueva sede de la conselleria de Salud, en la calle Jesús, serán investigadas las empresas adjudicatarias. Los consejeros que el 22 de febrero de 2007 acordaron por unanimidad la adjudicación de la obra del parque de bomberos eran: Luis Ramis de Ayreflor, Miguel Mateu Roig, Antonia Carrasco Martí, Jorge Sainz de Baranda, María del Dulce Nombre García, Felisa Vidal, Joan Pol y Alejo Reynés.
La policía sostiene que los contratos fueron amañados y diseñados 'a medida' de algunas de las constructoras investigadas.