Zapatero dice en Eivissa que no pagará autopistas que destruyan el paisaje

En el primer acto del presidente en Eivissa, un mitin que empezó poco antes de las doce del mediodía, José Luis Rodríguez Zapatero advirtió durante su discurso, que se prolongó durante algo más de veinte minutos y que lo presenciaron cerca de un millar de personas, de que el Estado central «no financiará ninguna autopista que destruya el paisaje», haciendo referencia a los proyectos viarios de Eivissa y al convenio de carreteras que está por firmar.

En esta misma línea, Zapatero manifestó la necesidad de orientar el futuro hacia el desarrollo pero evitando la riqueza «a costa de destruir la tierra, el paisaje y el medio ambiente». Por todo ello, el presidente del Gobierno retó a los representantes de la Comunitat Autònoma a financiar todos los proyectos de investigación, de institutos tecnológicos «que hagan que el tejido productivo de Balears y de Eivissa no dependa sólo del turismo y de la construcción».

De hecho, el presidente mantuvo un breve encuentro antes del mitin con miembros de la Plataforma Antiautopista en el que éstos le entregaron un informe sobre el conflicto que se vive en Eivissa por la construcción de las autopistas.

El presidente del Ejecutivo inció su discurso haciendo referencia al fin de las hostilidades en Oriente Medio, a la necesidad de respetar los derechos de todos los ciudadanos y a la consecución de la defensa de la paz en el orden internacional. Acto seguido, Zapatero también trató algunos de los temas del programa electoral en el que resaltó la importancia de destinar más presupuesto a la investigación y a las becas para los estudiantes a base de recortar y eliminar «recursos estúpidos».

Entre estas limitaciones, el secretario general de los socialistas destacó la ley aprobada para limitar la propaganda institucional e invitó a la oposición a «que se la apliquen». También resaltó la aprobación de la reforma del Código Penal, que ha permitido, según señaló, incrementar el número de agentes del Cuerpo Nacional de Polícia y de la Guardia Civil y evitar la «delincuencia de cuello blanco», en referencia al caso de Marbella. En este punto, Rodríguez Zapatero destacó que con esta mejora por el incremento en las dotaciones, también en Eivissa, se ha logrado un «país más seguro para los ciudadanos, con seguridad pública y no como otros querían hacer, con seguridad privada».

El presidente también hizo mención a la necesidad de impulsar la educación pública para evitar los ratios elevados del fracaso escolar y ofrecer las mismas igualdades a todos los ciudadanos.

También se refirió a la Ley de Dependencia, que ha supuesto un «esfuerzo de gasto público importante», con la que «conseguiremos lograr la satisfacción de que en este país ninguno de nuestros mayores se sienta sólo», señaló. Sobre este proyecto, del que recalcó que habrá que contar con la ayuda de los ayuntamientos y de las autonomías, destacó además que permitirá crear muchos empleos entre los jóvenes y que la sociedad española «se sentirá orgullosa de dar una imagen digna y solidaria ante los demás y de los que vengan de fuera».

Posteriormente se desplazó a Formentera a bordo del «Nixe», y allí prometió que el nuevo deslinde de costas de la pitiusa menor será «justo».