TW
0

Un mes después y tras interrogar a casi un centenar de testigos, la comisión judicial de Balears desplazada a Argentina y Uruguay para ahondar en la investigación del «caso Formentera», regresó ayer a Palma. Exhaustos, pero con la satisfacción del deber cumplido, llegaron los integrantes de la delegación balear integrada por el juez instructor, Antoni Monserrat, el fiscal jefe de Balears, Bartomeu Barceló, y el secretario judicial, Carlos Amorena. El grupo de expedicionarios, como lo hizo a la ida, empleó la sala de autoridades del aeropuerto de Palma para realizar los trámites aduaneros. También regresaron los abogados Rafael Perera, de la defensa, Miquel Más y Ascensión Joaniquet, de las acusaciones particulares. El fiscal jefe, Bartomeu Barceló realizó el siguiente balance del viaje a Ultima Hora«Se han practicado las mayoría de las pruebas y se cumplió el objetivo de la comisión. Ha sido duro, bastante complicado, pero se ha cumplido». El letrado Rafael Perera, por su parte, dijo «este largo viaje ha sido muy útil, ha valido la pena». Y subrayó: «Ha representado un esfuerzo importante para el magistrado instructor, Antoni Monserrat, y para el fiscal jefe de Balears, Bartomeu Barceló, tanto en el orden profesional como en el orden familiar, que creo hay que reconocer y subrayar. Las pruebas fueron instadas por los abogados de la acusación particular y el resultado ha demostrado que la tesis mantenida por estos letrados se está desmoronando como un castillo de naipes. No se ha demostrado, ni se ha aportado ninguna prueba para sustentar la tesis que han venido manteniendo desde hace cinco años los abogados de la acusación particular, en el sentido de afirmar que la Casa Balear de Santa Fe era la tapadera o el instrumento para realizar una amplia operación de fraude electoral para canalizar diferentes determinados votos en un sentido determinado.

Los abogados de las acusaciones particulares, a través de Miquel Más, realizaron el siguiente balance: «Nuestra valoración del viaje es altamente positiva, considerando que se ha avanzado de forma decidida en la investigación del grave delito electoral y contra la democracia, cometido en Baleares en 1999. Se ha evidenciado, asimismo, el acierto de la Sala de lo Civil y Penal del TSJB de ordenar la práctica de nuevas diligencias».