Un grupo de inversores mallorquines acaba de comprar el emblemático
hotel L'Hermitage de Orient por cerca de dos millones de euros a un
grupo alemán suizo con el objetivo de modernizarlo y reconvertirlo
en un establecimiento de referencia a nivel internacional.
El hotel L'Hermitaje se instaló en una mansión del siglo XVII,
que fue en aquella época vivienda de obispos y monasterio. Con el
paso del tiempo fue reconvertido en un hotel, que en los últimos
quince años fue gestionado por capital suizo-alemán, pero problemas
en la gestión del mismo (en diez años ha tenido siete directores)
propiciaron la decisión de la propiedad de cerrarlo a finales del
pasado año y ponerlo en venta. Los contactos con los actuales
propietarios, todos ellos mallorquines y relacionados con el mundo
de la construcción y la hostelería, se iniciaron en diciembre de
2004, formalizándose la venta en la primera quincena de enero de
2005.
El hotel, de cuatro estrellas y con 24 habitaciones, será
rehabilitado en profundidad para mejorar sus instalaciones,
infraestructuras y ofrecer mayores servicios hoteleros específicos
a la calidad de este establecimiento. «Fue uno de los primeros
hoteles rurales de Mallorca y desde siempre ha tenido unas
connotaciones especiales al estar ubicado en un lugar privilegiado,
como es Orient, que evoca a la Mallorca soñada y perdida en otros
lugares. Vamos realizar una fuerte inversión para mejorarlo y crear
un hotel de referencia, ofreciendo una hotelería diferente y con
valor añadido. Creemos en su gran potencialidad y en la demanda de
este producto turístico en la Isla», indicaban ayer fuentes de la
actual propiedad.
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