TW
0
PAU CATALÀ Uno de los pocos puntos que hemos ganado a favor en materia de ecología este siglo XXI es que, hoy en día, ya nos damos cuenta de todo lo que hemos contaminado. No es que hayamos dejado de sobreexplotar nuestro entorno, pero por si sirve de consuelo ahora ya somos más conscientes de lo que causamos. Una de las ventajas que aporta esto es que, día a día, vamos dando pequeñas soluciones a todo lo que hemos ido degradando durante el siglo que hemos dejado, la última salida ha sido la nueva normativa que prohíbe la comercialización de la gasolina con plomo.

Ante la problemática que causaría el que no hubiera ningún carburante que sustituyera a la súper, ya que más de un 20% de coches aún funciona con ésta, las compañías petroleras han creado un nueva gasolina que sustituya a la anterior. Desde el día 1 de este mes ya podemos encontrar en las estaciones de servicio la súper de 97 octános sin plomo que sustituye a la anterior súper. Ésta presenta la particularidad de que, en lugar de plomo, lleva un nuevo aditivo menos contaminante.

Aparte de esta característica, poco se diferencia de la súper tradicional ya que el precio no varía. Este carburante mantiene las prestaciones de los motores, por lo que la vida de los vehículos no se verá alterada. Los ciudadanos, que ya estaban bien informados del cambio que se ha llevado a principios de agosto, se han mostrado conformes con la solución tomada por las petroleras. Si bien muchos se muestran reacios a que el precio no descienda, también es de agradecer que al menos se mantenga.