TW
0

El proyecto de «Ahorro Ético» promovido por Colonya Caixa Pollença, tras tres meses de funcionamiento, ha conseguido aunar a toda una serie de instituciones que quieren potenciar al máximo los aspectos sociales y solidarios de la banca, siendo en estos momentos una iniciativa pionera a nivel de las Islas y del Estado. El Comité Etico de este proyecto, integrado por Cáritas Diocesana, Fundació Deixalles y la Fundació Guillem Cifre de Colonya, presentó ayer el balance del ejercicio 2000, en el que se formalizaron 313 libretas con un depósito global de 153 millones de pesetas.

El presidente de la Fundació Guillem Cifre, Martí Rotger, junto a los representantes de Cáritas Diocesana, indicó que este proyecto «es una apuesta solidaria de Colonya con el objetivo de contribuir a un desarrollo de la conciencia de solidaridad dentro del mundo financiero». Tanto Cáritas Diocesana como la Fundació Dexailles (PIMEM) puntualizan que se con el «Ahorro ético» se pretende «concienciar a las empresas de que utilicen esta vía para financiar proyectos solidarios. El primer beneficiario de los intereses éticos ha sido la Asociación Es Garrover de Inca, a la cual se le hará entrega de una donación de 600.000 pesetas».

Las 313 cartillas abiertas, que corresponden a 411 titulares de personas físicas y 29 personas jurídicas, han generado unos intereses éticos de 978.000 pesetas, «procedentes de la cesión del 50 por ciento de los intereses brutos acreditados, que han sido cedidos por los titulares para donaciones. El Comité Etico es el encargado de controlar, supervisar, cualificar y decidir sobre la finalidad de las donaciones que se formalicen en el futuro».