Policías fronterizos israelíes toman posición en el complejo de Al-Aqsa. | Reuters - AMMAR AWAD

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Varios países árabes condenaron los disturbios entre fieles palestinos y la Policía israelí esta madrugada en la mezquita de Al Aqsa en Jerusalén, y afirmaron que este tipo de acciones «exacerban la ira» de los países islámicos y de todos aquellos que tengan «conciencia». El Ministerio de Exteriores egipcio aseguró en un comunicado que el país árabe considera estas escenas como «odiosas» y añadió que «las repetidas violaciones israelíes de la santidad de los lugares sagrados exacerban los sentimientos de ira y enfado entre todo el pueblo palestino, los pueblos islámicos y las personas que tienen conciencia en todo el mundo».

Egipto pidió a las autoridades israelíes que detengan «inmediatamente estos ataques que aterrorizan a los fieles que han tomado la Casa de Dios como un refugio seguro durante el mes sagrado de ramadán». Por su parte, el Ministerio de Exteriores saudí condenó este «flagrante irrumpimiento» y rechazó estas prácticas que «socavan los esfuerzos de paz y contradicen los principios y normas internacionales con respecto a las santidades religiosas».

Por otro lado, el portavoz el Ministerio de Exteriores jordano, Sinan Majali, indicó en un comunicado que estas «continuas violaciones y ataques a lugares sagrados podrían conducir a una nueva escalada, responsabilizando a Israel de la protección de los fieles en la mezquita de Al Aqsa y de las consecuencias perjudiciales de esta escalada».

Agentes de la Policía entraron en Al Aqsa, tercer lugar más sagrado del Islam e importante foco de tensión en la zona, durante este madrugada y se enfrentaron con palestinos que se habían encerrado en la mezquita con piedras y fuegos de artificio, según un portavoz policial israelí. De acuerdo a información de la agencia oficial de noticias palestina, Wafa, más de 400 palestinos fueron detenidos y decenas resultaron heridos durante los enfrentamientos con la Policía.

Wafa citó a testigos que describieron «un uso excesivo de la fuerza» por parte de los agentes israelíes, que habrían lanzado gases lacrimógenos dentro de la mezquita y disparado balas recubiertas en caucho. Un comunicado de la Policía israelí mencionó que «alborotadores enmascarados perturbaron el orden» con «cánticos incitadores y con violencia dentro de la mezquita», donde se habrían «atrincherado con fuegos de artificio, palos y piedras».

Como respuesta, el Ejército israelí y milicias de la Franja de Gaza intercambiaron proyectiles esta madrugada, en lo que marca el primer incidente violento de peso desde el comienzo del mes sagrado de ramadán. Los episodios de este miércoles marcan una escalada de la tensión en la zona, donde se vive el inicio de año más violento en mucho tiempo, con el aumento de ataques tanto de palestinos como de colonos judíos que viven en Cisjordania ocupada, así como el incremento de violentas redadas israelíes en los territorios ocupados.