Fotografía de archivo del banco Credit Suisse en Zurich, Suiza. | ENNIO LEANZA

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El Banco Central Europeo (BCE) se mantendrá previsiblemente este jueves en la senda de subidas de los tipos de interés porque todavía no ha ganado la batalla contra la inflación y pese a las turbulencias en los mercados financieros tras la quiebra del estadounidense Silicon Valley Bank (SVB). El BCE ha mostrado desde hace semanas su disposición a subir el jueves el precio del dinero en la zona del euro en medio punto porcentual, hasta el 3,5 %.

De este modo, la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero a los bancos a un día, se situaría en el 3 %. Pero la quiebra del banco californiano SVB, especializado en la financiación de empresas emergentes tecnológicas, ha sacudido a los mercados financieros y despertado el temor de que se produzca un contagio a otros muchos bancos de todo el mundo como ocurrió tras el colapso del banco de inversiones estadounidense Lehman Brothers, en 2008.

El Gobierno estadounidense se ha hecho con el control del Silicon Valley Bank y garantiza los depósitos a través de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, por su sigla en inglés), y la Reserva Federal (Fed) lo hace con el suministro de liquidez. Esta intervención ha contenido el pánico en los mercados.

El colapso del SVB repercutió en todo el sector bancario y en todo el mundo cayeron en picado en bolsa y los mercados comenzaron a pensar que la agresiva subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federa habrían inducido a esta debacle, y de ahí se ha empezado a especular con que el BCE no va a subir hoy sus tipos de interés en medio punto y que podría decantarse por un aumento menor, de un cuarto de punto. No obstante, la mayor parte de los analistas considera que el BCE mantendrá sus planes de un incremento de medio punto porcentual debido a que no ha ganado la lucha contra la inflación todavía.

La inflación general se desaceleró hasta el 8,5 % en febrero, pero la inflación subyacente aumentó hasta el 5,6 %. El BCE mantiene que su objetivo es llevar la inflación hasta el 2 %.

La economista para Europa del gestor DWS, Ulrike Kastens, considera que «el BCE está lejos de alcanzar su objetivo de inflación en el medio plazo, por lo que, como ya se había previsto en la reunión de febrero, es probable que vuelva a subir los tipos de interés oficiales en 50 puntos básicos». «Es probable que la tasa de inflación subyacente, que subió al 5,6 % en febrero, haya alarmado a los miembros del Consejo de Gobierno del BCE, sobre todo por las perspectivas de que siga subiendo», comentó Kastens. Agregó que el mercado laboral se mantiene sólido, los salarios subirán y la escasez de mano de obra también seguirá provocando aumentos salariales.

Sin embargo, la analista también destaca que son visibles los primeros signos de desaceleración, la economía pierde impulso lentamente y los préstamos, especialmente en el mercado inmobiliario, disminuyen de forma significativa.

Para el economista sénior en Generali Investments Martin Wolburg, «que el BCE optará por subidas de 50 puntos básicos en las dos próximas reuniones (marzo y mayo)», a la vez que indicó que «la desinflación inducida por los precios de la energía cobrará impulso en los próximos meses. Pero la inflación subyacente se mantendrá mucho más estable».

El BCE publica también sus nuevas previsiones de inflación y crecimiento en la zona del euro. En diciembre pronosticó en 2023 un crecimiento en la eurozona del 0,5 % con una inflación del 6,3 % y en 2024 un crecimiento del 1,9 % con una inflación del 3,4 %. El BCE previó en diciembre que la inflación será del 2,3 % en 2025, por lo que todavía superará su objetivo del 2 %.