Ministros de la UE orientarán a Bruselas sobre cómo abaratar el gas. | FABIAN BIMMER

TW
1

Los ministros de Energía de la UE se reúnen este miércoles en Praga para analizar la inminente extensión al resto del bloque comunitario del «mecanismo ibérico» de España y Portugal, para afinar el diseño de una plataforma comunitaria de compras conjuntas de gas y para debatir cómo fijar un tope de precio a las importaciones de ese hidrocarburo. «Tenemos que tener la plataforma de compras conjuntas funcionando lo antes posible», dijo un alto funcionario europeo sobre una iniciativa que reclaman desde hace más de un año España, Francia, Rumanía, Grecia y República Checa, pero que aún no se ha concretado.

Los ministros discutirán también sobre cómo ampliar al resto de la UE el «modelo ibérico» que disfrutan España y Portugal desde junio y que reduce el impacto artificial del precio del gas en el mercado de la electricidad. Además, intentarán avanzar en cómo fijar un precio máximo a todas las importaciones de gas en la UE, una idea que apoyan al menos quince países que representan al 64 % de la población de la UE, entre ellos Francia, España, Polonia, Bélgica, Eslovenia o Grecia, pero de la que recelan Alemania y la Comisión.

El principio reposa en que la UE es un enorme comprador internacional que importa la inmensa mayoría de los 400.000 millones de metros cúbicos (400 bcm) de gas que consume al año, algo menos de la mitad de lo que quema Estados Unidos (870 bcm), algo más que China (345 bcm) y muy por encima de Japón (110 bcm). Muchos Estados miembros consideran que el bloque comunitario debe hacer valer su peso en el mercado, donde actualmente paga más que otros compradores, y creen que para ello se debe fijar un precio máximo de compra. Pero esa apuesta asusta a algunos países, con Alemania a la cabeza, que tras quedarse sin gas ruso cree que esa imposición podría desviar a otros mercados los barcos metaneros que transportan gas natural licuado (GLN).

El objetivo es que la comisaria de Energía, Kadri Simson, presente a finales de mes una propuesta legislativa con algunos o todos los puntos debatidos en Praga, que los ministros analizarán en el consejo formal de Energía que se celebrará en Luxemburgo el 25 de octubre, tras una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno el 20 y 21 donde también pesará la energía. Se intentará «terminar el trabajo» a inicios de noviembre, en el que será el cuarto consejo extraordinario de ministros de Energía desde julio.