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Un soldado francés ha disparado este viernes a un hombre que iba armado con una arma blanca cerca de la entrada del museo Louvre de París, según ha informado la agencia France Press.

Al parecer el hombre ha atacado al militar, por lo que éste le ha disparado. El agresor está gravemente herido, y hay una segunda persona detenida, a la espera de que la investigación determine su supuesta participación en el ataque.

France Press ha citado fuentes de la prefectura de Policía y ha asegurado que el hombre se ha lanzado con un machete hacia los militares y policías que custodiaban la zona conocida como el Carrusel del Louvre, profiriendo gritos de 'Allahu akbar' (Alá es grande), algo que ha llevado al primer ministro francés, Bernard Cazenueve, a informar de que el ataque es «aparentemente» terrorista.

Uno de los miembros de las fuerzas de seguridad resultó herido en la cabeza por el agresor, y ante la amenaza, otro de los efectivos disparó su arma hasta cinco veces, hiriéndole de gravedad en el estómago. Las mismas fuentes precisaron que el atacante sigue vivo y fue evacuado del lugar por los bomberos de la capital francesa.

Dos mochilas

Asimismo, los agentes inspeccionaron dos mochilas que portaba el agresor en el momento del ataque, aunque no encontraron explosivos. Pese a ello, por seguridad, se ha establecido un perímetro que impide el paso desde los jardines que rodean el museo, e incluye el carrusel y todo el complejo del Louvre.

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Sin embargo, en el momento del ataque había unas 250 personas en el interior del museo, que han sido custodiados por miembros de las fuerzas de seguridad en distintas zonas seguras, y evacuados en grupos pequeños después de realizar los controles necesarios.

«Incidente serio de seguridad pública en curso en París en el área del Louvre», confirmó en Twitter el Ministerio del Interior galo en los primeros momento de incertidumbre, mientras las calles de la zona estaban siendo vaciadas de tráfico y peatones.

Posteriormente, un portavoz del ministerio quiso reconocer ante los medios la templanza y «gran profesionalidad» con que actuaron en todo momento los policías y militares, así como la de los trabajadores del museo, atendiendo a los visitantes en todo momento.

También recordó la necesidad de no publicar informaciones falsas, y recomendó a los ciudadanos seguir las instrucciones de seguridad a través de los canales oficiales.

Francia se encuentra en estado de emergencia desde los atentados perpetrados por milicianos del Estado Islámico el 13 de noviembre de 2015 en la capital francesa, que dejaron 130 muertos.

El último gran atentado tuvo lugar la noche del 14 de julio, durante los festejos del Día de la Bastilla, cuando el tunecino Mohamed Lahouaiej Bouhlel arrolló con un camión el paseo marítimo de Niza, matando a 86 personas.