Miltares llegan al lugar donde se encontraron los cuerpos sin vida de 8 soldados y de 3 civiles, cerca a la entrada a las barracas militares Monte Txota, en la isla de Santiago, Ciudad de Praia (Cabo Verde). | Efe

TW
0

Las autoridades de Cabo Verde arrestaron este miércoles al soldado sospechoso de haber asesinado a once personas, entre ellas dos españoles, en el cuartel militar de Monte Tchota, informaron medios locales.

El supuesto autor de la masacre, identificado como Manuel António Silva Ribeiro, de 21 años, fue detenido en el barrio de Fazenda, en la capital del archipiélago, Praia, a unos 45 minutos del cuartel de Monte Tchota.

Ha sido trasladado ya a dependencias policiales para su interrogatorio y posterior puesta a disposición judicial.

El ataque, ocurrido en la madrugada del martes, se produjo en el destacamento militar del Centro de Transmisiones de Monte Tchota, en la isla de Santiago, la mayor de las diez que componen el archipiélago -localizado frente a las costas de Senegal, a 2.900 kilómetros al sur de Lisboa- y donde se encuentra la capital del país, Praia.

Noticias relacionadas

La República de Cabo Verde, antigua colonia portuguesa con unos 500.000 habitantes, está conmocionada por el trágico asesinato que las autoridades atribuyen a «motivaciones personales» y no al narcotráfico o al terrorismo, como se había apuntado en un primer momento.

Los dos españoles muertos en el suceso trabajaban para DF Núcleo, filial de la multinacional asturiana Duro Felguera, y se encontraban en el país africano realizando labores de revisión de antenas de telefonía, como las que se encontraban en monte Tchota.

El ministro español de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, declaró este miércoles que los cadáveres de ambos españoles están en un hospital y que se está haciendo todo lo posible para agilizar su repatriación a España.

A raíz de lo ocurrido, el Gobierno de Cabo Verde ha decretado dos días de luto nacional.

Aparte de los dos civiles españoles, en la misma tragedia fallecieron otro civil y ocho militares, todos ellos caboverdianos.