TW
4

El Consejo de Seguridad de la ONU ha convocado para hoy una reunión urgente con el fin de abordar la situación en Siria después de las denuncias sobre un nuevo ataque con armas químicas cerca de Damasco.

La reunión tendrá lugar a partir de las 15:00 horas (19:00 GMT), a petición de cinco de los quince miembros del Consejo, Francia, Reino Unido, Luxemburgo, Corea del Sur y Estados Unidos, según confirmaron a Efe fuentes diplomáticas.

Por su parte, el secretario general, Ban Ki-moon, dijo estar «conmocionado» por esta nueva denuncia y anunció que la misión de expertos que se encuentra en Siria para investigar otros presuntos ataques negocia con las autoridades incluir este último.

El equipo, liderado por el profesor sueco Ake Sellström, llegó a Siria el pasado sábado con un mandato inicial de catorce días.

El régimen de Damasco y las Naciones Unidas continúan discutiendo «en paralelo» otras posibles denuncias de uso de armas químicas tal como acordaron en julio ambas partes, detalló hoy ante la prensa un portavoz de la ONU, Eduardo del Buey.

El secretario general, añadió el portavoz, reafirmó nuevamente su determinación para que se investiguen todas las denuncias y reiteró que de confirmarse el uso de armas químicas sería una violación de las leyes internacionales.

La opositora Coalición Nacional Siria (CNFROS) denunció que al menos 1.300 personas murieron hoy en un ataque supuestamente cometido con armas químicas en la zona de Guta Oriental, en los alrededores de Damasco, acusaciones que fueron negadas por las autoridades sirias de manera inmediata.

Los rebeldes criticaron la pasividad internacional ante el presunto ataque químico, según dijo en Estambul el portavoz de la CNFROS, George Sabra, una actitud que interpretan como un respaldo al régimen de Bachar al Asad.

Por su parte, el régimen sirio confirmó que lanzó hoy una gran ofensiva sobre los barrios de la periferia de Damasco controlados por los rebeldes, pero negó que haya utilizado armas químicas, como ha denunciado la oposición.

Tanto el régimen de Damasco como los insurgentes se han acusado recíprocamente de emplear este tipo de armas en Siria, uno de los siete países que no ha firmado la Convención sobre Armas Químicas de 1997.

Desde que se inició la guerra civil en Siria, en marzo de 2011, han muerto más de 100.000 personas y casi 7 millones necesitan ayuda humanitaria de emergencia, según las últimas cifras de Naciones Unidas.