Soldados surcoreano participan en maniobras militares en Cheorwon. | Reuters

TW
3

Corea del Sur ha advertido este lunes de que habrá una «fuerte respuesta» a cualquier «provocación» procedente de Corea del Norte, después de que el régimen comunista declarara el «estado de guerra» entre ambos países. Por su parte, Corea del Norte ha vuelto a nombrar a Pak Pong Ju como primer ministro tras su destitución en 2007.

«La razón para la existencia de unas Fuerzas Armadas es proteger al país y al pueblo de Corea del Sur, así que si hay cualquier provocación, debemos responder fuertemente en la etapa inicial sin ninguna consideración política», ha dicho la presidenta de Corea del Sur, Park Geun Hye, en la reunión que ha mantenido con el ministro de Defensa, Kim Kwan Jin.

Kim ha adelantado que el Ministerio de Defensa prepara «un plan de contingencia de disuasión activa para neutralizar rápidamente cualquier amenaza nuclear o de misiles balísticos procedente de Corea del Norte».

Además, ha explicado que para ello desplegará una «cadena mortal», un sistema de ataque capaz de detectar, atacar y destruir los objetivos nucleares y de misiles balísticos del régimen comunista, a pesar de que estaba previsto para 2015.

El jefe de las Fuerzas Armadas ha indicado que también planea adelantar el despliegue del sistema de defensa aérea de Corea del Sur, capaz de interceptar misiles o aviones de combate a entre 10 y 30 kilómetros de altura. Y ha apuntado que, con la finalidad de aumentar la capacidad de vigilancia de Corea del Sur, prevé acelerar el despliegue de los aviones no tripulados ('drones') Global Hawk, y poner en órbita dos satélites para 2021.

Se espera que el nuevo plan de contingencia del Ministerio de Defensa sea aprobado por el Congreso el próximo mes de octubre, coincidiendo con la reunión anual entre los titulares surcoreano y estadounidense, en este caso Kim y Chuck Hagel.

Por otro lado, y también con ayuda estadounidense, el Ministerio de Defensa ha revelado que elaborará un plan de disuasión de ataques informáticos, que estará listo para las maniobras militares conjuntas que se celebrarán el próximo mes de agosto.

Japón pone en alerta a sus fuerzas ante las amenazas norcoreanas

El ministro de Defensa de Japón, Itsunori Onodera, ha revelado que las Fuerzas de Autodefensa (SDF) están en alerta, después de que Corea del Norte amenazara con atacar las bases militares que Estados Unidos posee en Yokosuka, Misawa y Okinawa.

En una entrevista concedida a la televisión pública NHK, ha indicado que desde que el régimen comunista formuló su amenaza, las SDF están en alerta para detectar cualquier movimiento sospechoso procedente de Corea del Norte.

Además, Onodera ha advertido de que las amenazas norcoreanas contra sus vecinos regionales solamente contribuirán a aislar aún más al Gobierno de Kim Jong Un en la comunidad internacional, y altos cargos del Ministerio de Defensa han indicado que, a pesar de que se trata de una amenaza sin precedentes, no conviene responder de forma desmesurada a las declaraciones norcoreanas.

Por otra parte, Estados Unidos no ha detectado ninguna «acción» sobre el terreno que respalde la «dura retórica» bélica expresada en los últimos días por el régimen de Corea del Norte, según ha informado este lunes el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, el cual ha añadido que no ha visto acciones que respalden la retórica.

Mientras tanto, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha denunciado la «carrera de provocaciones» de Corea del Norte. Por ello, ha explicado que desde el Gobierno se han puesto en contacto con Corea del Sur para «entablar negociaciones con todos los países del área para mantener la estabilidad y seguridad en la zona».

García-Margallo ha realizado estas declaraciones a los medios de comunicación, antes de participar en la inauguración de la nueva sede de Casa Mediterráneo, al ser preguntado sobre la situación de Corea del Norte.

El ministro ha explicado que desde su departamento se han puesto en contacto con la embajada española y con todos los españoles que están en Corea del Sur, que son unos 700. A su juicio, «hay una enorme preocupación en España, en la Unión Europea y en todo el mundo por la carrera de provocaciones de Corea del Norte».