TW
2

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha anunciado este viernes que la comunidad internacional va a destinar un paquete de 40.000 millones de dólares para ayudar a los países inmersos en la llamada 'Primavera Arabe', empezando por Túnez y Egipto.

En declaraciones al término de la cumbre del G-8 en Deauville, en el norte de Francia, Sarkozy ha explicado que los ocho países más poderosos --Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Italia, Alemania, Japón, Canadá y Rusia-- han aprobado 20.000 millones de dólares de asistencia procedentes de organismos multilaterales de crédito.

Otros 10.000 millones vendrían de países árabes y el resto de acuerdos bilaterales, ha precisado. «Son 20.000 millones de bancos multilaterales, en los cuales no incluyo al FMI. Pensamos que era más honesto no incluir al FMI en este recuento», ha precisado.

«Además de esto, hay cerca de 10.000 millones de dólares en compromisos bilaterales que no mencionamos en la declaración. Y finalmente, otros 10.000 millones de dólares en contribuciones de países del Golfo incluyendo Arabia Saudí, Qatar y Kuwait en un fondo especial fijado para este propósito», ha aclarado.

Según el comunicado publicado por el Elíseo al término de la cumbre, del total de 20.000 millones de bancos multilaterales, 3.500 serán aportados por el Banco Europeo de Inversiones (BEI).

En el caso de Francia, hará contribuciones a través de la Unión Europea, que además de la aportación del BEI, contribuirá con 1.100 millones de euros de aquí a 2013, y a través de la Agencia Francesa de Desarrollo, con 1.100 millones de euros «preparados en condiciones ventajosas para este mismo periodo para apoyar la transición democrática» en Túnez y Egipto. En concreto, precisa el comunicado, Túnez recibirá 425 millones de euros y Egipto 650.