La ministra de Igualdad Irene Montero. | Efe

TW
7

El 92,92% de los inscritos de Podemos que han votado en la consulta exprés del partido han avalado que la Ejecutiva tenga plenos poderes para decidir sobre las negociaciones y posible acuerdo con Sumar, según ha informado la formación morada. Concretamente, un total de los 49.089 inscritos han votado sí a esta opción mientras que otros 3.568 (6,75%) se han opuesto, con únicamente 177 votos en blanco.

En total, han participado un total de 52.829 simpatizantes y militantes de Podemos desplegada durante unas 20 horas. La cifra de participantes es similar aunque algo inferior a la votación de la última Asamblea Ciudadana del partido, cuando 53.500 inscritos eligieron a la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, como nueva líder de Podemos tras dejar la política el exvicepresidente Pablo Iglesias.

«¿Aceptas que el Consejo de Coordinación de Podemos, siguiendo el criterio de unidad que marcó el Consejo Ciudadano Estatal, negocie con Sumar y, en su caso, acuerde una alianza electoral entre Podemos y Sumar?», es la pregunta del partido a sus inscritos que con amplísima mayoría han respaldado afirmativamente.

Ahora, el Consejo de Coordinación formado por 25 miembros y la secretaria general tendrá la última palabra sobre si finalmente confluyen con Sumar y una quincena de fuerzas progresistas este viernes, dado que hoy culmina el plazo para presentar las coaliciones electorales al 23J. Los morados se han mostrado partidarios de entrar en una candidatura de unidad pero buscan que se tenga en cuenta su peso en la confección de la candidatura, dado que se reivindican como fuerza de mayor impacto nacional pese al mal resultado que obtuvieron el 28M.

Belarra subrayaba ayer tras anunciar la consulta que revalidar el actual Gobierno de coalición y profundizar en las transformaciones sociales de esta legislatura depende, básicamente, de que las fuerzas agrupadas en Sumar y Podemos se presenten en una única candidatura a las elecciones generales.

Hasta el momento, Sumar tiene atados ya pactos y preacuerdos con Drago Canarias, Iniciativa del Pueblo Andaluz, Batzarre (Navarra), la Chunta aragonesista, Verdes Equo, los baleares de Ara Més y Compromís. Además, la adhesión de IU y En Comú Podem se da por descontada y Más Madrid ya acordó en un plenario el miércoles apoyar a Sumar pero con algunos condicionantes como la preservación de su marca en la circunscripción y que su peso se vea reflejado en las listas, acorde con los resultados del 28M.

Mientras, las negociaciones prosiguen y los morados ayer llevaron a la mesa de negociación de Sumar la posibilidad de concurrir en solitario en la Comunidad Valenciana el 23J y forme parte de la coalición de izquierdas en el resto de territorios, algo que desde el partido instrumental se descartó al sentenciar que no se contemplaba esa vía.

Los morados trasladaron dicha posibilidad en el marco de las negociaciones para forjar una coalición amplia de partidos de izquierda, cuyo plazo termina mañana, para así evitar «vetos» que se estaban produciendo en territorios, en alusión a Compromís, a su presencia en las listas electorales por esta comunidad.

No obstante, la formación valenciana ha negado en diversas ocasiones que estén excluyendo a nadie. También fuentes implicadas en el proceso negociador han deslizado que otro punto de fricción radicaría en el futuro de la ministra de Igualdad, Irene Montero, dado que es un referente para el partido morado y se sospecha de que otros agentes del proceso no quieren concederle presencia en las listas o un puesto de salida. No obstante, desde Sumar, mediante su portavoz de campaña Ernest Urtasun, ya manifestaron que no se aplican exclusiones a nadie y que esa misma posición han trasladado partidos como Compromís y Más Madrid, aunque la dirección del Podemos ya advirtió el lunes que los vetos «personales» era una forma de torpedear la unidad.

El día final de la negociación también ha llegado en una semana convulsa para Podemos y con varios dirigentes autonómicos como Galicia, Navarra y Extremadura apelando a la responsabilidad para llegar a un acuerdo con Sumar de cara a las generales, enfatizando que la unidad de la izquierda es necesaria e imprescindible. La dirigente extremeña, Irene de Miguel, instó a «dar un paso a un lado» a los que no querían el camino de la unidad. Ayer, la actual líder de Podemos Aragón, Maru Díaz, avanzó que dejará de ser coordinadora de la formación morada tras las elecciones generales yque tampoco recogerá su acta de diputada autonómica tras el «nefasto» resultado en las pasadas elecciones del 28M. De cara a las generales y sobre la opción de frente amplio en la izquierda, pidió «altura de miras», «generosidad» y «humildad».