Joan Rotger, el domingo en el momento de ejercer su derecho a voto.

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La victoria incuestionable del histórico Joan Rotger en Selva, que recupera la Alcaldía para el PP con mayoría absoluta tras la moción de censura que le envió a la oposición a mediados de legislatura, se fraguó en las tres pedanías del municipio (Caimari, Moscari y Biniamar) con especial incidencia en la primera.

Si las dificultades para ceder a la Conselleria d’Educació unos terrenos aptos para construir la ansiada nueva escuela de Caimari desencadenaron las negociaciones y el posterior pacto entre PI, Arrelam y ExP que acabó enviando a Rotger a la oposición, el apoyo de los caimariencs ha sido ahora clave en la reconquista de Rotger.

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Los ‘populares’ obtuvieron en Caimari 382 votos, 316 más que la segunda lista más votada que fue la de Arrelam. Ello a pesar de que el actual alcalde Toni Frontera (Arrelam) reside precisamente en este núcleo. El PSOE obtuvo 44 votos y el PI tan solo 19. El PP también se impuso de forma incuestionable en Moscari (con 165 votos) y Biniamar (118). En las tres mesas electorales de Selva, aunque también se hizo con la victoria, la distancia con Arrelam fue mucho menor.

Visto lo visto, el equipo de Joan Rotger se prepara ya para recuperar la figura de los alcaldes pedáneos en los tres llogarets: Tófol Barceló para Caimari, Rafel Gelabert para Moscari y Beatriz Lechuga para Biniamar.

Este modelo tradicional de gobierno con alcaldes pedáneos residentes en cada pedanía, que tantos frutos electorales le dio al PP en el pasado, había sido abandonado por el actual pacto de gobierno entre el PI, Arrelam y ExP.