El parque fotovoltaico de Can Mariano Lluquí, sobre un terreno de 2,99 hectáreas en Sant Joan de Labritja, tiene una potencia de 3,1 MW gracias a sus 9.240 paneles. | Daniel Espinosa

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La puesta en marcha de los primeros dos parques fotovoltaicos en Eivissa ha supuesto un paso de gigante para la isla en su camino hacia la transición energética. La potencia de energía renovable instalada en la mayor de las Pitiüses se ha multiplicado por seis este mismo mes de octubre, pasando de 1,29 MW a 7,96 MW. «Si esto lo combinamos con los 9 MW en autoconsumo ya instalados nos hace albergar esperanzas de que tendremos una transición energética importante en Eivissa», apunta el vicepresidente y conseller de Transició Energètica del Govern balear, Juan Pedro Yllanes.

Sin embargo, Eivissa tiene dos grandes hándicaps a la hora de impulsar proyectos de parques fotovoltaicos como los recientemente inaugurados: su orografía y que más de la mitad de los ibicencos vive en casas de campo aisladas de los núcleos urbanos, lo que hace muy difícil encontrar suelo disponible adecuado para la instalación de placas solares.

«Ha costado conseguir las licencias a nivel administrativo porque son los primeros parques fotovoltaicos que se han tramitado en Eivissa. Son pequeños en comparación con los que se instalan en la Península y estamos contentos por haber sido los pioneros», explica Jordi Quer, ingeniero responsable de los dos proyectos promovidos por la empresa alemana Enerparc, que tiene en mente la puesta en marcha de una veintena de parques solares en Mallorca.

PARQUES. El parque fotovoltaico de Bosc d’en Lleó, situado en Sant Rafel de sa Creu, tiene una potencia de 3,5 MW gracias a sus 11.088 paneles solares que ocupan 3,65 hectáreas de terreno, mientras que el de Can Mariano Lluquí, en Sant Joan de Labritja, cuenta con 9.240 paneles instalados en 2,99 hectáreas para una potencia total de 3,1 MW. Ambas instalaciones suman 6,6 MW que darán energía solar a 2.300 unidades familiares, lo que significa ahorrar más de 4.000 toneladas de CO2 al año. «Iniciativas como estas, que tienen un impacto paisajístico y visual muy pequeño, son las que queremos impulsar desde el Govern balear. No queremos grandes parques y menos en una isla como Eivissa», destaca Yllanes.

Estos dos parques fotovoltaicos son pioneros en Eivissa pero no en las Pitiüses, ya que en Formentera existe uno desde el año 2008 promovido por la empresa asturiana TSK. Un parque de 2,1 MW de potencia situado en la carretera de Cala Saona que en su época fue muy controvertido ya que no contó con el apoyo del equipo de gobierno progresista del Consell de Formentera, formado por Gent per Formentera y PSOE. Un rechazo con justificación medioambiental, ya que para la instalación de las placas solares fue necesario la tala de parte de un bosque. En esta ocasión, los parques se han instalado en fincas rústicas en desuso con un impacto visual mínimo. Además de una barrera vegetal compuesta por pinos y algarrobos, «la altura de las estructuras es sensiblemente más baja, 2,20 metros. Lo mínimo», explica el ingeniero Quer.

«No hay más proyectos de parques solares en cartera y por eso queremos impulsar el autoconsumo y las comunidades energéticas. Es importante solarizar espacios urbanizados, parkings, polígonos industriales, edificios públicos o azoteas privadas que se ofrezcan para tener este tipo de placas fotovoltaicas, porque son el tipo de instalación que más sentido tiene en Eivissa. Tener parques como estos son importantes porque son un refuerzo y necesitábamos este impulso porque la isla estaba atrasada en el impulso de renovables. Eivissa se merece ser una isla energéticamente soberana», señala el vicepresidente balear.

AUTOCONSUMO. El Govern ha detallado que en los primeros nueve meses de este año la implantación de instalaciones de autoconsumo por parte de particulares y empresas en el archipiélago balear ha crecido un 49% más que en todo 2021. Sin embargo, este crecimiento ha sido mucho menor en Eivissa, tan solo del 6,3%, ya que si en todo el pasado año se llevaron a cabo 286 instalaciones de autoconsumo, entre enero y septiembre de 2022 la cifra ha sido de 304. En cambio, en Formentera el crecimiento ha sido del 116%, en Menorca del 52% y en Mallorca del 54%.

No obstante, también cabe resaltar que en los dos últimos años se han implantado el 71% del total de instalaciones de autoconsumo con las que cuenta Eivissa, que es de 832. En 2019, Eivissa apenas contaba con 103 instalaciones, por lo que en tres años se han multiplicado por ocho. «Las instalaciones de autoconsumo están aumentado de forma exponencial. Es una buena noticia que los ciudadanos de Balears estén implicados en un contexto de crisis energética y climática y que vaya de la mano de las administraciones en el proceso de descarbonización», afirma Yllanes. Este incremento en el número de instalaciones hace que «mucha más gente y empresas tengan una factura de la luz más barata», recuerda el conseller de Transició Energètica.

POTENCIA. En cuanto a la potencia de las 304 nuevas instalaciones de placas solares para el autoconsumo en estos primeros nueve meses del año en Eivissa esta ha sido de 3.310 kW. Un cifra ligeramente por debajo de los 3.360 kW de potencia de las 420 instalaciones de Menorca. La potencia total instalada de energía renovable de autoconsumo en Balears es de 74,49 MW, de los que tan solo 9 MW se encuentran en Eivissa, lo que supone el 12,1% del total. Menorca, una isla con menor población que la mayor de las Pitiüses, acumula 9,8 MW (el 13,1%), mientas que Formentera tiene el 1% con 0,75 MW y Mallorca lidera la acumulación de potencia de autoconsumo con 54,9 MW y el 73,7% del total. Para el director general de Energia i Canvi Climàtic del Govern, Pep Malagrava, los datos del tercer trimestre de 2022 «mantienen la tendencia de aumente en autoconsumo y, año tras año, aumentamos los datos del año anterior. Además, en generación renovable superamos los 200 MW de potencia renovable instalada hasta alcanzar un hito importante. Los datos son positivos pero necesitamos acelerar aún más, teniendo en cuenta la crisis energética y la emergencia climática que vivimos».

Un dato a tener en cuenta es que la mayor parte del número de instalaciones de autoconsumo implantadas en Balears son por parte de particulares. De las 8.444 instalaciones registradas hasta el tercer trimestre de este año, 7.080 están en viviendas de ciudadanos, lo que supone el 83,8% del total. Las instalaciones de particulares han crecido un 23% en comparación con el trimestre anterior, mientras que el incremento de las instalaciones en empresas lo ha hecho un 15,5%. De este último tipo hay 1.072 en el archipiélago balear, lo que supone el 12,7% del total.

En comparación con 2021, la potencia de generación renovable instalada en Balears ha crecido un 34,55%, pasando de los 155 MW de finales del año pasado a los 208,4 MW del tercer trimestre del presente ejercicio. En Eivissa, la potencia generada es de 7,9 KW, la misma que en Menorca. Formentera suma 1,9 MW y Mallorca, 191,1 MW. Si a este crecimiento se suma también el de los parques fotovoltaicos, la potencia renovable en Balears ha aumentado un 40% en los primeros nueve eses del año para un total de 284 MW en el tercer trimestre, 208,5 MV procedentes de los parques y 74,49 MW del autoconsumo.