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Brexit, guerra comercial, nueva crisis, recesión, ralentización, industria de Alemania, tipos de interés… son algunas de las palabras que coparon titulares relacionados con las bolsas en 2018 y que se siguen escuchando superado ya el primer trimestre de 2019.

Cierto es que las bolsas cayeron con fuerza durante el año pasado, pero también lo es que los mínimos de Nochebuena coincidieron con los indicadores de miedo en estado de máxima ebullición.

El resultado es un primer trimestre espléndido para las bolsas, especialmente las americanas, que siguen, contra todo pronóstico, ganando terreno a las europeas hasta el punto de llegar el índice S&P 500 (en el momento de escribir este artículo) a alcanzar sus máximos históricos y el tecnológico Nasdaq 100 a superarlos.

La clave es saber si seguirán subiendo o bien han llegado a su máximo, en cuyo caso las estrategias long-short explicadas aquí la semana pasada cobrarían más sentido.
Precisamente, los máximos históricos son la primera referencia de las bolsas norteamericanas: una rotura de estos niveles, técnicamente, debería generar la reactivación de las compras (el motivo por el que se frenó la subida ya ha desaparecido).

En este sentido a quien no haya comprado no le debería bastar una perforación puntual, a un especulador cortoplacista sí, sino que esperaría a ver una consolidación (varios cierres por encima o incluso algún cierre semanal). Para el caso del S&P, el nivel clave son los 2.490 puntos y para el Nasdaq los 7.720.

En caso de conseguir dicha consolidación el camino les quedaría libre para continuar con la tendencia alcista. Sin embargo, si no lo logra, habría que mirar los soportes en los que se debería apoyar antes de volver a atacarlos.

Para los más cortoplacistas, el S&P tiene un primer soporte en 2.870; aunque los más sólidos estarían, por este orden, en 2.800 y 2.550 (este último alejado casi un 13%).

En cambio, para el Nasdaq, nos encontramos con los 7.100 puntos en primera instancia y los 6.600 (-14%) después son los soportes a respetar a largo plazo.