El producto kilómetro cero es más sano y más sostenible, y por ello los esfuerzos se dedican a que el campo balear no se abandone, promocionando tanto la hortaliza y los árboles frutales como a la agricultura tradicional de secano, algarrobos, olivos, almendros y cereales para alimentar a los animales. Además, los datos incluyen las actividades de ganadería, caza, silvicultura, explotación forestal, pesca y acuicultura.
Y a pesar de su importancia, esta actividad es residual en el Producto Interior Bruto balear y en cada uno de los municipios. La media de Valor Agregado Bruto (PIB antes de impuestos) de la agricultura en Balears es del 0,4%. En concreto, esta actividad supuso una contribución de 93 millones de euros al VAB de las Islas en 2014.
En comparación con España, solo Madrid presenta niveles de actividad agrícola más bajos, en concreto un 0,1% del VAB. Y respecto al entorno de la UE-28, Balears es una de las regiones menos especializadas en agricultura de la Unión, con niveles similares a Lisboa, París y algunas regiones del centro de Inglaterra o de Centroeuropa.
Cabe recordar que la especialización se entiende siempre en relación al conjunto del municipio, y no en términos absolutos. La Fundació Impulsa, que ha generado los datos, entiende que si los municipios están más especializados en un sector es porque presentan ventajas competitivas en aquellas actividades y, por tanto, a la hora de estudiar el famoso ‘cambio de modelo’, los pueblos más especializados de cada sector pueden servir de ejemplo y de polo de atracción.
Por islas, Menorca es la isla más dedicada al sector primario, con un 0,7% de su VAB. En Menorca, la principal actividad es la ganadería, con una gran tradición en la producción de leche, sobre todo dedicada al queso. Le sigue Mallorca con un 0,4%, en Formentera la agricultura pesa un 0,3% y en Eivissa un 0,2%.
LA ZONA DEL PLA, LÍDER. Los municipios más especializados en agricultura son los del centro de Mallorca. Además de Sant Joan, Ariany y Porreres, destacan sa Pobla (4,2%) -el municipio por antonomasia de las patatas se queda así en quinto lugar-, Vilafranca (3,6%), Petra (2,8%), Montuïri (2,4%) y Llubí, Maria de la Salut y Santa Eugènia (los tres con un 2,2% de valor agregado bruto de agricultura).
En Eivissa el pueblo con más industria es Sant Joan de Labritja (0,8%), y Sant Josep y Eivissa están por detrás, ambos con un 0,1%. Formentera presenta un 0,3%.
En Menorca, el municipio más especializado en agricultura es Ferreries, con un 1,3%, y el menos especializado es Maó (0,3%).
Por la parte baja de la lista destaca el cero de Calvià, que registra apenas 602.423 euros de actividad agrícola, una cantidad ínfima respecto al volumen del municipio. Y con un 0,2% están Son Servera, Palma, Marratxí, Andratx y Alcúdia.
En términos absolutos, de nuevo, Palma va al a cabeza en Valor Agregado Bruto del sector agrícola con 19,84 millones de euros. Otros municipios destacados son Manacor (7), sa Pobla (5,5), Ciutadella (4,6), Felanitx (4,4) o Inca (3,4 millones).
Para el alcalde de Sant Joan, Pablo Pascual, “es natural que Sant Joan tenga una posición destacada en agricultura, ya que es uno de los municipios del Pla con más cereales”. Pascual explica que existen varias empresas de gran tamaño con mucha tradición, aunque también pone de manifiesto que el sector no es relevante en empleo. Como sectores más predominantes en el pueblo destaca el funcionariado y las pymes, con un incremento notable del turismo fruto del auge de las viviendas vacacionales.
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