La cinta, que ya se está grabando en Madrid y está producida por Feelgood Media y Kowalski Films con la colaboración de La Perifèrica Produccions –que comanda Cesc Mulet, que ha trabajado con directores como Agustí Villaronga–, está inspirada en hechos reales y gira en torno a un grupo de niñas internadas en un centro de menores que caen en una red de prostitución. Además, la película ha conseguido una ayuda al desarrollo de la Consejería de Cultura de la Comunidad de Madrid.
Realidad
«Es una historia sobre una realidad durísima. Una realidad invisible, o mejor dicho, una realidad a la que nadie quiere mirar», explicó la propia Macías en una entrevista publicada en la página web de CIMA Mujeres Cineastas, colectivo que aglutina a las mujeres que trabajan en el séptimo arte en España. La realizadora añade: «Porque claro, sobrecoge pensar que España es el segundo país del mundo en consumo de pornografía infantil y que la explotación sexual a menores sigue existiendo».
Macías, que ha dirigido también cintas como Embarazados (2016), Bajo el mismo techo (2019) o Fuimos canciones (2021), concreta que «esa es la primera razón por la que hay que hacer esta película, para convertir unas líneas de unas noticias dispersas o unas estadísticas impersonales en una historia. Una historia que arroje luz sobre el infierno de tantas y tantas chicas y chicos abusados, esos que no son productivos, que no consumen, que tienen problemas feos, casi innombrables».
Macías puntualiza también que en Las chicas de la estación habrá «belleza». «En el fondo, es una historia sobre la capacidad infinita del ser humano de resistir y florecer en las peores circunstancias y estoy segura de que los espectadores, además de descubrir la vida de nuestras protagonistas, descubrirán las lecciones que sólo pueden enseñar aquellos a quienes les han tocado las peores cartas en la vida y luchan cada día por mejorar sus vidas».
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