Un momento de la acción de la obra.

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La vida de María Callas, quizá la mejor cantante de la historia, tenga tanto de leyenda como técnica y capacidad tenía la diva. Su técnica, conocida como sfogato, es solo accesible a un reducido número de voces y es, precisamente, lo que da nombre al espectáculo que acoge mañana, a partir de las 20.00 horas, el Auditòrium de Palma, donde un reparto liderado por Mabel del Pozo y Eva Marco recrea no solo de lo que fue capaz la Callas, que no es poco, sino también de todo aquello que la excedió.

Es la propia Marco, que se pone en la piel de la «Callas artista», la que explica que «para mí y todo el equipo hacer esta función es brindarle un homenaje diario». Marco, que también es productora de la obra, asegura que «es un reto profesional», pero que ya ha merecido la pena por «todas las sorpresas y alegrías que nos ha dado Sfogato».

Sobre meterse en la piel de la Divina, para Marco se trata de una cuestión de «humildad y mucha intensidad». A su vez, la cantante destaca que «no solo vemos a la artista, sino también a la Callas terrenal, la que sufre, la despreciada y se ve muy criticada». Es, pues, una «manera de descubrir a la vulnerable Callas para desmitificarla», un intento que, confiesa Marco, «llega tarde, pero es necesario». En cualquier caso, «era tan mística y magnética la mujer como la artista» de la que se puede aprender una lección vital: «Tenía muy entrenado el músculo de la voluntad».

Marco, por otro lado, se confiesa «abrumada» por el hecho de encarnar una figura que tuvo que estudiar durante sus años de formación, aunque con la salvedad de que «siempre la he admirado, desde pequeña y no hay vídeo de ella cantando que no conozca o no me sepa de memoria».

Por ello y por otras razones, Marco se confiesa «diferente» tras haber entrado en la producción. «Sin pretensiones, pero me siento en el camino de ser el mejor músico que puedo ser» y añade que ha aprendido muchísimo de un papel que le exige una parte interpretativa y técnica diferente. No obstante, el objetivo final de cada función es siempre el mismo: «Disfrutar y emocionar y la respuesta del público es abrumadora».