De izquierda a derecha: Eugenia Corbacho, Lluís Sintes, Núria Vilà, Francesc Blanco y Maria Victòria Cortès, esta mañana en Sa Nostra. Foto: MIQUEL À. CAÑELLAS | miquel a. canellas

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Así como la inolvidable película Pretty Woman adaptó La Traviata con Richard Gere y Julia Roberts, Euroclàssics recupera la ópera de Verdi, la más representada en todo el mundo, para darle un cariz social, empoderando y dando visibilidad a la mujer prostituta, la protagonista de la pieza. Ànima de La Traviata se estrena este viernes, a las 21.30 horas, en el claustro del Convent de Santa Anna de Muro, dentro del festival MallorcÒpera.

Eugenia Corbacho, quien se ha encargado de la dirección escénica, ha explicado esta mañana en la rueda de prensa celebrada en Sa Nostra que «cuando te basas en una de las óperas más conocidas del repertorio no te queda otra que ir a la fuente original, que es casi como un documental de denuncia. Tano Verdi como Alejandro Dumas [cuya novela La dama de las camelias inspiró al compositor], quisieron dar testimonio a una mujer, Violetta, que por haberse dedicado a la prostitución vivía estigmatizada y marcada por la sociedad, que le privó del deseo de libertad. Verdi es el Shakespeare de la ópera».

La soprano catalana Núria Vilà confiesa que esta versión le sorprendió, pues se aleja del formato clásico, aunque enseguida se sintió muy cómoda por la «coherencia» que presenta. «Las pulsiones de los personajes son las mismas. Esta Violetta es muy decidida, pero topa con una sociedad que no le deja ser ni evolucionar como ella querría, hacia su propia felicidad. Al final, no puede decidir cómo vivir, pero sí puede elegir cómo morir», señala.

El barítono menorquín Lluís Sintes, otro de los personajes del montaje, reconoce que su papel representa «la sociedad cargada de prejuicios». «Además voy vestido como un hombre de hoy en día, pues te das cuenta de que todos esos prejuicios siguen vivos hoy en día. Es lo más doloroso y, a la vez, el mensaje más potente», subraya. Sintes también destaca que los tres cantantes [Vilà, el tenor José Manuel Sánchez y él mismo] están acostumbrados a montajes más multitudinarios, por lo que hacer algo «tan íntimo y directo es un reto, pues todo se centra en nosotros mismos; la proximidad es muy grande y eso para nosotros tiene un punto de peligro y de reto».

De hecho, Corbacho reitera que la propuesta tiene «un punto muy contemporáneo y purista». «Verdi quiso estrenar la ópera ambientada en su época contemporánea pero precisamente la sociedad o el empresario de turno le impidió hacerlo, pues le decían que no podían levantar el telón y que hubiera una crítica tan feroz con los personajes vestidos como los espectadores que estaban sentados ahí. Verdi logró estrenarla, pero tuvo que ambientarla un siglo antes. Por otra parte, tampoco se le permitió usar el título de La Traviata, pues hacía alusión a la descarrilada, a la perdida... una título potente que usaba ese eufemismo para hablar de una prostituta».

Corbacho también hace hincapié en los prejuicios que hay en torno a la ópera, a menudo concebida como algo «elitista, elegante y romántico». «Verdi fue el precursor del verismo, un movimiento que luego desarrollaron autores como Mascagni y Puccini. Hay un fragmento de La Traviata en el que, en vez de cantar, Violetta habla, algo nada habitual en una ópera romántica. Verdi constituyó un puente hacia el verismo y nosotros hemos respetado eso, no hemos querido edulcorarla ni disfrazarla».

En cuanto a la dirección musical, que firma Maria Victòria Cortès, insiste en esa «carga psicológica» que puede suponer la obra para los solistas. «Normalmente el peso de la ópera está repartido entre los diferentes solistas y el coro, con descansos, pero aquí es una presencia constante. Es un gran desgaste físico y psicológico». Asimismo, recalca que esta versión ofrece «una lectura más actual y naturalista de cómo de siente la gente, no es ni un cuento ni algo muy dramático, lejano al espectador, sino que es muy purista, muy verídico».

Gira

Después de su estreno en Muro, este sábado recalará en Sa Nostra (Palma) y el 18 de junio, en el Claustre de Sant Domingo de Pollença. Después, girará por diferentes escenarios de la Isla: Portocolom (29 de julio), Campos (24 de septiembre), Llucmajor (29 de septiembre), Binissalem (1 de octubre) e Inca (13 de noviembre). Las entradas se pueden adquirir de forma anticipada a través de la página web www.euroclassics.es.