La directora Clara Roquet (3i) ha sido galardonada con el Premio Gaudí a la mejor película en lengua no catalana por el film "Libertad", durante la gala de los Premios Gaudí, la cita más importante del cine catalán. | Efe - Andreu Dalmau

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Dos jóvenes cineastas, Neus Ballús y Clara Roquet, han triunfado con sus respectivas películas, «Sis dies corrents» y «Libertad», en la XIV edición de los Premios Gaudí de la Academia del Cine Catalán, en una gala marcada por una voz contra la guerra en Ucrania y que confirma el peso creciente de las directoras. «No a la guerra, nunca y en ninguna situación», han dicho la presidenta de la Academia, Judith Colell, y los miembros de la junta directiva Maria Molins y Carlos R. Ríos, en su discurso, recordando el sufrimiento del pueblo ucraniano, un tono y unas palabras que se han ido repitiendo a lo largo de la ceremonia, que también ha mostrado su apoyo a Ucrania. Ha entregado uno de los premios la actriz ucraniana Polina Dzhakaieva, que, emocionada, ha dicho que pueden «destruir nuestras casas, nuestros puentes y pueden quitarnos la vida, pero el cine siempre estará allí para derribar las mentiras, la locura y la sed de sangre. Nosotros venceremos».

En el año de la recuperación después de una edición marcada por la pandemia, la gala de la XIV edición de los Gaudí ha propuesto un cambio de formato, sin presentadores, con un escenario central de 360º en medio de la Sala Oval del MNAC, a la que han asistido 1.300 invitados. La gala, en la que ha habido referencias al cantante Pau Riba, fallecido este domingo, y en la que se ha lanzado un mensaje en favor de la diversidad en un sentido amplio, ha contado con las actuaciones de la soprano Dolors Aldea, el dúo de folk gregoriano Tarta Relena y la multicultural banda Las Karamba.

Los Gaudí han reconocido la fuerza y creatividad del cine dirigido por mujeres, con un palmarés que ha coronado a «Sis dies corrents» como mejor película en lengua catalana, y a «Libertad» como mejor película en lengua no catalana. «Sis dies corrents» ha recibido otras cuatro estatuillas, entre ellas la de mejor dirección para Neus Ballús, que ya consiguió el doblete de película y dirección con «La plaga» en 2013. La crónica de una semana de trabajo de tres fontaneros del extrarradio barcelonés ideada por Ballús se ha llevado también los galardones a mejor protagonista masculino para Mohamed Mellali y el de mejor actor secundario para Valero Escolar (en un nuevo reconocimiento a esta pareja, después del premio de interpretación en el Festival de Locarno), y el de Mejor montaje para la propia directora y Ariadna Ribas.

Además del premio a mejor filme en lengua no catalana, Clara Roquet ha ganado el Gaudí al mejor guion por «Libertad», una cinta en la que ofrece la mirada a la amistad de dos adolescentes de orígenes y realidades muy diferentes en un verano en la Costa Brava, que la Academia ha reconocido con los Gaudí a mejor protagonista femenina para la joven María Morera, y el de mejor fotografía, para Gris Jordana. «El retorn, la vida després de l'ISIS», de Alba Sotorra, ha ganado el Gaudí a mejor documental con un trabajo que reflexiona sobre el perdón y las segundas oportunidades a partir de la peripecia de cinco mujeres occidentales que intentan empezar de nuevo y superar su pasado como miembros del ISIS.

Laura Mañá firma «Federica Montseny, la dona que parla», mejor película para televisión, que hace un retrato de la que fue la primera ministra de la historia de España, durante el gobierno de la Segunda República. Dos títulos más incorporan la mirada y las voces de las mujeres: «Chavalas», dirigida por la debutante Carol Rodríguez Colás, un canto de amor a la vida de barrio que le ha dado el Gaudí a mejor actriz secundaria a una de las revelaciones interpretativas de este año, Ángela Cervantes; y «Farrucas», de Ian de la Rosa, primer director trans que gana un Gaudí, en su caso por un relato de cuatro amigas de raíces marroquíes que sueñan en un futuro mejor desde su barrio de la periferia almeriense, distinguido como mejor cortometraje. «Mediterráneo», crónica de la génesis de la ONG Open Arms dirigida por Marcel Barrena, ha ganado los Gaudí a mejor música original, compuesta por Arnau Bataller; a mejor dirección de producción, para Albert Espel y Kostas Sfakianakis; y a mejores efectos visuales para Alex Villagrasa; y además, ha sido reconocida por los espectadores con el premio Especial de Público, que la Academia del Cine Catalán entrega por quinto año consecutivo.

Otra de las favoritas, con 13 nominaciones, «Las leyes de la frontera», historia de amor fatal y homenaje al cine quinqui, con la que Daniel Monzón propone un viaje a la Girona de los años 70 adaptando la novela de Javier Cercas, se ha llevado los premios a mejor dirección artística, para Balter Gallart; mejor vestuario para Vinyet Escobar; y mejor maquillaje y peluquería para Sarai Rodríguez, Nacho Díaz y Benjamín Pérez. «El ventre del mar», de Agustí Villaronga, película que, con doce, era la que partía con más nominaciones, no ha recibido finalmente ninguna estatuilla.

Uno de los momentos más emotivos de la gala ha llegado con la entrega del Premio Gaudí de Honor-Miquel Porter 2022, que ha recogido el veterano y prestigioso director de fotografía Tomàs Pladevall, de manos de Josep Maria Pou y Mercè Sampietro, premios honoríficos en 2017 y 2018, respectivamente.