Guillem Nadal, Lali Piera y Álvaro Alcázar, en un momento de la inauguración de la muestra del mallorquín. | José Sevilla

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Projecte per a una illa es la base de la exposición que Guillem Nadal (Sant Llorenç des Cardassar, 1957) muestra hasta el 10 de marzo en la Galería Álvaro Alcázar de Madrid, coincidiendo con la semana de las ferias de arte. La muestra se basa en un proyecto de Nadal iniciado en 2016 y que ahora retoma con 16 obras elaboradas recientemente, en gran y pequeño formato, utilizando soportes de papel, tela y tabla. El artista isleño emplea el lenguaje de la abstracción, creando formas curvas, bajo las que subyace la idea de isla, «isla como recorrido sentimental, como metáfora de la vida, como un camino que te lleva nuevamente al punto de partida y finalmente, a la posibilidad de construir tu propia isla», explican los organizadores de la muestra.

En las piezas continuación de Projecte per a una illa, una de las series más valoradas del creador mallorquín, Nadal parece que «narra los cuadros», unas obras que «destacan por su gran gestualidad, conferida por el proceso creador del artista», señalan desde la galería. «Nadal trabaja con sus manos, arando el lienzo, produciendo surcos, texturas; introduciéndose literalmente en la obra, donde destaca el juego de luces y sombras», añaden.

«Es una serie que es como las páginas de un libro, nunca se acaba, cada día trabajo en una pieza diferente», indica Nadal, quien se alegra de regresar a Madrid tras aplazar la exposición por culpa de la pandemia. «No creo que volvamos a la normalidad en el mundo de las ferias y exposiciones. El glamour del arte se ha acabado. Ahora hay más actividad digital que presencial», apunta. Eso sí, se muestra feliz porque la exhibición de sus obras coincida con la Semana del Arte de Madrid durante la que se celebrarán Arco, Art Madrid, Urvanity, Hydrid y JustMad, entre otras, una manera de hacer más visible la creación del pintor.

La producción de Nadal engloba diferentes series, donde proyecta fragmentos de sí mismo, actitudes o sentimientos; es el caso de Miralls o El Paisatge de la memòria, constituyendo así su Projecte per a una illa, una pequeña parte de esta extensa obra, añaden desde la galería que ya mostró dos piezas de Nadal en la última feria de arte Estampa.