Julio Fuentes se ha instalado recientemente en la Isla. | Teresa Ayuga

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Antes de dedicarse de lleno al diseño gráfico y la ilustración, Julio Fuentes (Palma, 1980) trabajó profesionalmente durante casi diez años en la cocina, en Barcelona. «A pesar de que viniera del mundo del arte, me costó mucho dar el paso, soy muy inseguro y luché contra mis propias inseguridades», confiesa. Empezó a trabajar en la revista Cáñamo, en la que todavía sigue, y en 2018 le llegó su primer gran proyecto propio: Atlas de los Lugares Literarios, de Cris F. Oliver (Montena). «Le tengo especial cariño y es un proyecto que me ha marcado emocionalmente», reconoce.

Cuatro años después, la vida, como él mismo reconoce, le ha dado la razón y sus trabajos artísticos van creciendo. Literatura, gastronomía, filosofía y pensamiento o mitología clásica son algunos de los temas que aborda Fuentes en sus trabajos artísticos. Uno de los últimos proyectos es La cocina es tuya (Reservoir Books), de la chef vasca Aizpea Oihaneder y que cuenta con divertidas intervenciones de El Hematocrítico. «Es un libro pensado como un juego para niños a partir de 7 años, aunque es totalmente transversal y los adultos lo pueden disfrutar igualmente, como es el caso de obras como El Principito o autores como Roald Dahl», matiza. Para este volumen, el mallorquín apuesta por los colores y las formas grandes y «fáciles de identificar», aunque contempla la «diversidad» de cada alimento. «Es un homenaje a la lámina clásica, pero más moderna», apunta Fuentes, que acaba de dejar atrás Barcelona y se ha instalado recientemente en Sineu, que se ha convertido en refugio de grandes artistas, como Max, Iván Mata, Ata Lassalle o Gabi Beltrán.

Blackie Books

Blackie Books es uno de los sellos con los que colabora habitualmente Fuentes. Para esta editorial ha ilustrado las últimas tres agendas, por las cuales recibió el premio Junceda de Ilustración en 2020. También ha participado en el segundo título que forma parte de la colección Clásicos liberados, El libro del Génesis, para el que ha dibujado algunas miniaturas de diosas madre de diferentes culturas maquetadas. Además, al lado de estas creaciones figura un cuadro de Mati Klarwein, fallecido en Deià en 2002. Este volumen cuenta con un texto inédito de Sara Mesa y fragmentos seleccionados de Voltaire, Kierkegaard, Borges, Primo Levi, Nick Cave o Stephen Hawking, entre otros.

Portada de ‘El grupo de Bloomsbury’.

Las fajas de los libros también pueden ser pequeñas obras de arte y, según Fuentes, «en diseño e ilustración, todos los elementos cuentan». Así, ha realizado ilustraciones para las de la colección Clásicos radicales de Taurus. Entre estos últimos trabajos figura El grupo de Bloomsbury, de Quentin Bell, para el que ha dibujado a Virginia Woolf y su marido Leonard: «Es un texto sobre el influyente y pionero grupo de Bloomsbury al que pertenecieron en aquella encorsetada alta sociedad inglesa de principios del XX», comparte en redes sociales. También sobresale la faja de El mundo de la Antigüedad tardía, del historiador Peter Brown, para el que ha ideado un Marco Aurelio y un Mahoma. «Es un libro que ahonda en alejarse de la idea extendida de ‘declive’ del imperio romano y muestra hasta qué punto este periodo fue crucial y sus rasgos siguen presentes en nuestra contemporaneidad», señala.