El percusionista, Juanjo Guillem, junto con su instalación sonora. | Pere Bota

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Es Baluard Museu d’ArtContemporani conmemora las víctimas del 11-S con la exposición L’Arxiu de la Pols de Elena del Rivero. La muestra se inaugura mañana sábado, a las 19.00 horas, junto con la performance del percursionista de la Orquesta Nacional, Juanjo Guillem (Valencia, 1965). Su acción musical y sonora Pre- polvo- post «recreará la tensión que se vivió en el momento en el que el avión colisionó con las Torres Gemelas», afirma el director.

«Me considero un músico clásico de mi época», comenta Guillem. El músico, residente en Madrid, aterriza en la Isla para demostrar que «el ruido es música y la música es vida». Su actuación contará con la colaboración de la banda municipal de viento de Manacor, compuesta de un total de 50 miembros. Además, Guillem ha construido una instalación sonora dentro de la exposición con restos encontrados en los diferentes puntos verdes de la Isla. «Ahora estoy pensando cómo narices voy a entrar y salir de ahí dentro», bromea.

«Quiero que los asistentes sientan lo mismo que los terroristas cuando veían que llegaba el final», detalla Guillem. La performance comenzará con los músicos esparcidos por todo el espacio del museo, que comenzarán a crear una sensación de tensión con sonidos lentos y graves.

Poco a poco se irán acercando a la instalación sonora. Será ahí, donde a la media hora de que comience la actuación, «todo explotará». «En ese momento empezaré a crear sonido con todo lo que esté a mi alcance», asegura el percursionista.

Al mismo tiempo, la banda aumentará la intensidad y se elevará el sonido al agudo para «herir la sensibilidad del espectador». El momento, que durará un total de dos minutos, tiene un objetivo claro: «Nadie puede estar cómodo», comenta. Después, llegará el polvo, el silencio y poco a poco, los músicos irán desapareciendo hasta que el propio Guillem abandone el set.

Así, el percursionista acompañará la obra de Elena del Rivero. Ambos proyectos pretenden «la memoria colectiva y el dolor», el polvo, de un hecho que marcó un antes y un después en la sociedad actual.