Maria Pastor, Meritxell Oliach, Maria Gràcia Salvà, Bel Busquets y Kika Coll, en el laboratorio del Museu de Mallorca. | Jaume Morey

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El Museo de Mallorca ha aprobado un protocolo de entrega de material, con medidas de protección del material arqueológico y paleontológico así como instrucciones de siglatura o identificación y recomendaciones para su transporte, etiquetado y embalaje.

La vicepresidenta y consellera de Cultura, Patrimonio y Política Lingüística, Bel Busquets, ha presentado el protocolo de entrega de material arqueológico y paleontológico y ha destacado su importancia para «velar en cada paso de la cadena para recuperar bienes patrimoniales, estudiarlos, consolidarlos y difundirlos», ha informado el Consell de Mallorca en un comunicado.

El documento, que es vinculante, recoge las normas internas que se deben seguir para hacer los depósitos y las medidas de conservación relativas a la limpieza, etiquetado y embalaje de los bienes muebles que se depositen en el Museo de Mallorca, para poder preservar el patrimonio cultural, difundirlo y darle uso científico.

Busquets ha explicado que, según el protocolo, «si se producen hallazgos excepcionales que obliguen a tomar medidas adicionales de protección, conservación o custodia, las personas responsables informarán al Consell de Mallorca, que comunicará al Museo la decisión pertinente».

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Para poder depositar los materiales procedentes de intervenciones arqueológicas y paleontológicas, el responsable de la excavación lo comunicará al Museo de Mallorca, con una antelación mínima de 15 días. La solicitud de entrega de material se debe hacer en el Museo (Portella, 5) o solicitarla por correo electrónico.

La entrega de materiales se debe hacer en las dependencias de Son Tous (Camino de Can Palou) por parte del responsable. Según el protocolo, el Museo de Mallorca facilitará un número de sigla (documento de identificación de la pieza) al director de excavación o al personal autorizado previa solicitud por escrito.

Se trata de un número de inventario del Museo que permite relacionar la pieza con la documentación administrativa que se asocia al material. Esta sigla se hará constar tanto el registro como el inventario, que deben entregarse con la memoria que se redacte y el material arqueológico.

La directora del Museo, María Gracia Salvá, ha explicado que se ha reducido al máximo la sigla para facilitar el trabajo de los arqueólogos. «Las piezas muy pequeñas, frágiles o material orgánico no se deben siglar directamente, sino indirectamente, con el objetivo de facilitar la tarea de los arqueólogos», ha detallado.

En el acto de entrega, que deberá hacerse por norma en Son Tous, se llevará a cabo una comprobación de los materiales depositados y de la documentación que se aporta, y se firmará un acta de depósito provisional.

Una vez el material haya ingresado en el museo, el centro tiene treinta días hábiles para examinarlo. Si no hay ninguna deficiencia, entonces se entregará el acta de depósito definitivo.

El protocolo prevé también que, si las medidas sanitarias lo requieren, las piezas deben guardar una cuarentena de catorce días que se añade al plazo de treinta que tiene el museo para examinar el material.