Juan Trilla en la entrada de Akira Gallery. | Teresa Ayuga

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Un pedazo del imaginario nipón se acaba de instalar en la Costa de la Pols. Estudio Ghibli, Dragon Ball, Naruto y One Piece dan el salto del cómic y las películas al lienzo. Y el responsable de ello es el joven Juan Trilla, de 25 años, que se acaba de lanzar a la piscina del emprendimiento en estos tiempos de pandemia.

Y además ha osado abrir una galería de arte. Cuando la cultura es la hermana pequeña de la economía, esta nueva aventura de Trilla es un auténtico desafío.

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Redes

«Sé que ha sido todo un poco precipitado pero hay que mantener una actitud positiva. De todo se aprende», cuenta Trilla, que en las redes sociales se ha dado a conocer como @trillaros y donde ya había recibido sus primeros encargos, algunos de ellos desde la Península. Tras estudiar Diseño Gráfico, Trilla se decidió a dar rienda suelta a su afición por el dibujo, un autodidacta amante de la cultura pop japonesa. «Llevo un par de años pintando sobre lienzo y se me han ido acumulando los trabajos en casa. Así que tuve la idea de abrir la galería».

Este artista autodidacta confiesa que «admiro a los grandes clásicos de la cultura nipona y me dedico al fan art. Tomo como referencia a los personajes que ya existen y creo mis obras». Son Goku, Totoro, Akira o los personajes de Boku no hero se mueven a sus anchas en el centro de Palma, aunque también hay un hueco para los superhéroes de Marvel.

Próximamente, Akira Gallery se abrirá para que otros artistas del mundo manga puedan exponer y vender sus obras.

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