Agnès Llobet posó en Madrid. | José Sevilla

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La actriz Agnès Llobet (Pont d’Inca, 1984) protagoniza la docuserie Pioneras, sobre mujeres sobresalientes silenciadas por la historia, estrenada el jueves pasado. El capítulo en el que encarna a Dolors Aleu, la primera médica de España, se verá en la plataforma Movistar+ el 3 de diciembre. Al mismo tiempo, la intérprete continua con su papel de Àngela en Amor de cans, la serie de IB3 que está en su tercera temporada. Además, desde hace unos meses viaja semanalmente a Madrid para rodar La cocinera de Castamar, serie de Atresmedia protagonizada por Michelle Jenner y Hugo Silva.

¿Qué tiene de atractivo La cocinera de Castamar, la serie que ahora rueda en Madrid?
— El contraste entre diferentes mundos que conviven en la casa señorial: el de la alta sociedad, el romántico y el que se produce en la cocina, a lo Downton Abbey. Convive el submundo de los fogones con el mundo de arriba, el de la nobleza.

¿Cómo es trabajar con grandes actores como Michelle Jenner, Hugo Silva, Maxi Iglesias, Silvia Abascal, Roberto Enríquez y Nancho Novo?
— Siempre aprendes de los mejores actores y de los que no lo son tanto. Cada proyecto se convierte en un reto porque me enfrento a un lenguaje, equipo y dirección nuevos, que buscan diferentes objetivos.

¿Cómo es su personaje?
— Se llama Beatriz; es una integrante del servicio de la casa y trabaja en la cocina, donde se desarrolla todo este submundo de dinámicas de mujer. Es donde aparecen los roles femeninos de una clase social baja.

Pioneras es una serie atractiva y diferente que reivindica a féminas destacadas en la historia y que no fueron reconocidas en su momento. ¿Cómo sorprenderá al público?
— El primer gran atractivo lo aporta quien conduce esta serie documental con ficciones recreadas. Se trata de Nieves Concostrina, que es una bomba; es una gran comunicadora; es ácida... Te atrapa desde el principio. Es el primer gran ingrediente para dar voz a muchas mujeres silenciadas por la historia.

Durante la presentación de Pioneras criticaron ese olvido histórico de la mitad de la población.
— Las mujeres han sido y son el 50 por ciento de la sociedad y no es posible que todos los ejemplos de cualquier campo o área sean solo de hombres. En la búsqueda de mujeres destacadas, hemos encontrado tantas como hombres, pero ha habido un problema, ya que de muchas de ellas no se conserva ningún material.

En la serie documental usted encarna a Dolors Aleu, la primera mujer licenciada en Medina de España en 1882. ¿Qué le sorprende más de esta pionera?
— La determinación, una palabra que le queda corta. Qué convicción, qué coraje, qué profundidad de espíritu y fortaleza debió tener esta mujer de clase burguesa y con un padre policía para enfrentarse, no solo a las barreras de género, sino a las de clase. Se enfrentó a su familia y a la sociedad. En la Universidad la apedrearon y su padre le tuvo que mandar dos escoltas para que pudiera estudiar medicina.

¿Qué mujer de Mallorca podría incorporarse a Pioneras?
— Muchas.

¿Aurora Picornell?
— Es el referente.

Amor de cans, ¿qué ofrece la tercera temporada de la serie de IB3?
— Es una reinvención; un resurgir. Ahora, las Gamundines son señoras y quieren dirigir su gran imperio femenino. Aparecerán unas dinámicas renovadas. Cada una irá hacia su extremo entre un humor muy brutal y bestia. Si una era acelerada, se acelerará más; si otra era terrible, se volverá más terrible. A Àngela, que ha vivido en un mundo de fantasía y libertad, ya le hemos visto una parte algo oscura que jamás nos habríamos imaginado.

¿Cómo está la escena en Mallorca? ¿Se puede vivir de la interpretación en la Isla o hay que viajar a Madrid o Barcelona?
— En Barcelona los teatros lo han pasado peor que en Balears. Conozco a actores que por las circunstancias están en precario. Tengo amigos a los que desde principios de año les han cancelado tres y cuatro veces sus estrenos. Se puede vivir como actor en Balears y en Madrid, y también malvivir. No existe una panacea o defenestración de unos lugares u otros.

La pandemia ha afectado sobre todo a los músicos. ¿Cómo ha visto el daño causado a los artistas por el coronavirus?
— El mal es de raíz. Venimos de un sector precarizado y arrasado por la crisis de 2008. Es como si hubiera un gran incendio que lo quema todo y cuando salen los primeros brotes y arbustos, llega la gran pandemia. Es un mal cronificado; necesitamos regenerar la conciencia social de todos y plantearnos qué es para nosotros la cultura, además de qué lugar queremos que ocupe. Y todo debe ir acompañado de una consciencia real de la administración política.

Luisa Ignacia Roldán (Rocío Peláez), Dolors Aleu (Agnès Llobet), Carmen de Burgos (Elena González) y María de Castilla (Carmen Barrantes) son los personajes en los que se centra la docuserie. A través de ellas se desvelarán a otras mujeres pioneras de España.